Mucho se habla sobre la escena del grunge y de sus actores principales. Hoy, 5 de abril, la gente común y el mainstream esta acostumbrada a recordar la muerte de Kurt Cobain uno de los pilares de la escena de Seatle y vocalista de la banda Nirvana, la cual es recordada por todos gracias al canal de televisión MTV, quien en la década de los 90 se encargaban de transmitir cosas relacionadas con el rock y sus múltiples variantes.

Nosostros haremos recuento de otro personaje que fue también una de las cartas fuertes de esta escena, nos referimos a Layne Staley, la voz de la legendaria banda Alice in Chains, quienes eran el lado obscuro y macizo de la escena grunge, con guitarras afiladas, letras obscuras y atmósferas funebres que fotografiaban el lado nihilista de la juventud de esos días, aquellos días que ahora vemos tan lejanos.

Layne Staley fue siempre un tipo con una conducta introvertida, niñez y adolescencia difícil a causa de un padre con problemas de adicciones y abandono de hogar. Staley recurrió a las drogas para buscar refugio a todas las voces dentro de su cabeza, el único que no dejaba que esto se hiciera profuso fue Jerry Cantrell, compañero de la banda a la que pertenecieron y con la que consiguieron la fama a nivel mundial.

La voz de Staley fue tan legendaria que a pesar de toda la tortuosa situación, el abuso de sustancias y los problemas que dejó con estas acciones, siempre será recordada y alabada por los seguidores, también, aunque a muchos les pese y le lastime:

¡Aquí la prueba!