En el mundo de la música hay infinidad de ritmos, y muchos artistas llegan a hacer combinaciones que resultan verdaderas joyas, pero solamente uno ha logrado una mezcla tan peculiar de folk, country, rock, garage y grunge: estamos hablando de Neil Young.
Siempre inquieto desde pequeño por los géneros musicales, sus influencias fueron los artistas del momento que escuchaba en el radio: Elvis Presley, Chuck Berry, Little Richard, Jerry Lee Lewis, etc., y al igual que todos los jóvenes de la época su sueño era formar una banda. Cristalizó su sueño a temprana edad con su primera banda The Jades. Su misma inquietud lo llevó a formar bandas como The Squieres o Buffalo Springfield, aliarse a The Mynah Birds, a Crosby, Still & Nash hasta cabalgar con Crazy Horse, sin embargo, su inspiración y habilidades con los instrumentos le darían el impulso para llevar una carrera en solitario.
Autor e intérprete de grandes temas a prueba del tiempo como «Old Man», «Hey Hey, My My (Into the Black)», «Rockin’ in the Free World» y «Heart of Gold», Young no solamente es reconocido por su aportación e influencia musical que le ha valido el sobrenombre de “El padrino del Grunge”, sino también por su activismo en temas ambientales, de crítica social y de calidad humana. En 1985 desarrolló junto con Willie Nelson el concierto anual Farm Aid cuyo fin es apoyar económicamente a granjeros estadounidenses que se encuentran en situación de riesgo. También organiza anualmente el concierto Bridge School Benefit en Mount View, California, para recaudar fondos con el fin de financiar The Bridge School, una organización fundada en 1987 por su esposa Pegi Young que atiende a niños con parálisis cerebral, incluyendo a su hijo Ben, entre muchas otras actividades de beneficencia.
Sus canciones han servido de medio de protesta en diversos temas: «Cortez the killer» critica la manera en que Hernán Cortés saqueó y devastó con su llegada, «Out On The Weekend» relata la historia de un hombre buscándose a sí mismo por las calles de Los Angeles, «My My, Hey Hey (Out Of The Blue)» resume lo que para Young era el rock n’ roll: “Es mejor quemarse que desaparecer”, verso que utilizó Kurt Cobain en su nota de suicidio. Por si una canción no bastara para hacer una crítica, Young lanzó un álbum completo contra las compañías internacionales como Walmart, Starbucks y Monsanto: «The Monsanto Years».
Frecuentemente Young es invitado a realizar conferencias magistrales abordando diversos temas. En 2012 en el Festival de Cine de Slamdance, ofreció una plática acerca del fracaso y su importancia como catalizador de la confianza personal y el éxito.
“Asegúrense de darle la bienvenida al fracaso. Siempre digan: Fracaso, estás bien conmigo, ven. Porque así no tendrán ningún temor. Y si no tienen miedo y creen en sí mismos y se escuchan a sí mismos, son el número uno”
En este año fue invitado al Desert Trip, donde compartió escenario con Paul McCartney, The Rolling Stones, Roger Watters y Bob Dylan, dándole su justo lugar como leyenda viviente del rock. Se pronunció contra Donald Trump cuando éste utilizó su canción «Rocking in the Free World» en el lanzamiento de su candidatura y le prohibió su utilización en sus eventos de campaña.
Medio siglo. Toda una vida dedicada a la música. Considerado como uno de los más grandes guitarristas de la historia, reconocido con grammys, en el Salón de la Fama del Rock and Roll, y hasta con el nombre de una araña en su honor: la Myrmekiaphila Neilyoungi. 71 años rockeando en el mundo libre