La banda de indie rock liderada por Jack Tatum tiene nuevo disco llamado Indigo, 10 tracks con un sonido ochentero que amarás. A lo largo de casi una década Tatum nos ha enamorado con sus letras, pero a lado de músicos como Nathan Goodman en la guitarra, Jeff Haley en el bajo, Kevin Knight en el teclado y Jeremiah Johnson en la batería; hacen magia. Músicos talentosos que nos muestran un cuarto disco caracterizado por el dream pop y el synthpop con ese toque ochentero que lo caracteriza, a cargo del costarricense productor y artista visual Jorge Elbrecht.
Nocturne tuvo mucho éxito y gustó al público, así como también Life of Pause del 2016, sin embargo, podría decir que Indigo es el mejor álbum que han lanzado, aquí el por qué…
“Letting Go” demuestra dinamismo, el disco arranca muy bien con esta canción, guitarras y synths en armonía, un buen potencial para comenzar y ansias de escucharlo hasta el final, nos recuerda que “hay que dejar ir para ser más felices”. Algo similar pasa con “Oscilllation” incita al cambio, cuando nuestro futuro va tomando forma.
“Parterns in Motion” y “Wheel of Misfortune” son canciones con un ritmo tropical, los synths le dan el toque armonioso, incita al baile y a tomar el coche por la noche y viajar sin rumbo, tomar el sueño de las noches para encontrar el amor.
Si te late Fleetwood Mac o Toto, y demás grandes de los 80s, este disco te hará la noche, porque es justo el periodo del día en que podría darte más gusto escucharlo, queda garantizado con “Through Windows” otra de las rolas que con el sax y teclados remata super cool.
Después de haber recorrido la ciudad con estos tracks, la calma llega con “The Closest Thing to Linving” y “Dollhouse”, de atmósferas apacibles y relajantes, para cerrar con “Flawed Translation”, otra rola llena sintetizadores ochenteros y un buen cierre.
Jack Tatum sigue sin desprenderse de la esencia de lo que ha sido y es Wild Nothing hasta hoy, para muchos su música ya es clásica, cayendo en lo típico y debería desengancharse de lo que siempre acaba por hacer, sin embargo, hay quienes pensamos que le sienta bien esa particularidad, logró el aspecto de atemporalidad y así nos conquistó desde sus comienzos.
¡Escúchalo!
