Por: Verónica de la Mora

Entre distorsiones discretas y sintentizadores como protagonistas en cada canción, Chromatics nos llevan por atmósferas oscuras y cautivantes en Closer to Grey, el nuevo material tras el éxito de Kill for Love (2012). La pregunta que nos hacemos es: ¿La banda ha conseguido un trabajo limpio e innovador como su predecesor?

Tras el éxito de la película Drive de Nicolas Winding Refn en 2012, con una banda sonora diferente, gracias al uso de los sonidos clásicos del electropop con aires ochenteros. Entre las bandas que se destacaron dentro de su soundtrack estuvo Chromatics, quienes el mismo año estrenaron Kill for love, una pieza de culto donde las guitarras clásicas junto a los beats constantes fueron la clave del trabajo.

Después de siete años sin lanzar un material de larga duración y después de algunas especulaciones de un álbum llamado Dear Tommy, la banda estrenó en octubre (sin aviso previo) Closer to Grey. Un álbum que más que llevarnos al gris, juega con el sonido clásico de la banda solo que con más energía y momentos que parecen salidos de una película.

Desde el comienzo con un cover de la canción «Sound of Silence», una versión oscura y con cierta elegancia, la banda nos prepara en este camino de sonidos en los que el synthpop se apodera de los doce tracks que conforman el disco.

Tenemos preludios en temas como «Through the looking glass», así como canciones más ligeras y sueltas, acercándose al pop tal y como «You are no good» y «Closer to Grey»; algo más bailable sin perder el misterio generado en los tracks. Otro de los temas que se destaca por tomar la voz de Ruth Radelet con mayor fuerza es «On the Wall».

Algo que siempre ha marcado el trabajo del grupo liderado por Johnny Jewel es el planteamiento de los discos como soundtracks, en el hecho de plantear hasta un tema de amor con «Love Theme of Closer to Grey».

A diferencia de su trabajo anterior podemos decir que Closer to Grey cumple con lo esperado en un disco de Chromatics; es intrigante, nos lleva por esta especie de momentos que nos remiten al cine así como que el manejo de los sintetizadores es limpio. Sin embargo no es una pieza en la que veamos la capacidad creativa de Jewel y compañía en su mejor momento.

Al final del día, ustedes son los que tienen la última palabra, corran a escuchar Closer to Grey.