Fotos tomadas del Facebook oficial de Cuca
Por Sergio Garibay
«Ciudad de México y Guadalajara son ciudades hermanas, ciudades rockanroleras» – José Fors
Cuca anda presumiendo su séptimo retoño (disco) por varias ciudades del país, y aquí en la Ciudad de México su turno fue ayer 23 de junio en el Teatro Metropólitan.
La cita fue a las 8:30, sin embargo la fiesta inició poco antes de las ocho de la noche. Un grupo abridor ya estaba poniendo ambiente en el mítico recinto. Y no fue cualquier invitado. Un grupo, igual naciente de Guadalajara, complació a sus seguidores que había bastantes. Eran nada menos que Garigoles, los «Liuis Migueles» del rock.
Canciones como «Problemas» de su primer disco Todo el Orden de las Cosas me Llena de un Sentimiento de Angustia, «Navidad de a Mil», «Desnúdece» y su éxito mayor; Vudú prendieron los motores para la esperada presentación de Cuca en escenario.
Poco antes de las nueve de la noche, Cuca ya estaba subiendo a la tarima. El Metropólitan ya estaba lleno.
«¡Estamos aquí para aventar semen!» compartió José Fors (vocalista)
Y empezaron con una de su nuevo disco, sin titubeos. «Caperucita Roja» ya era entonada por la mayoría. En seguida «Arre Lulú» e «Hijo del Lechero» encendieron al Teatro. En la rola de Hijo del Lechero, José Fors tomó una clase de jeringa enorme, llena de lo que supuestamente era «semen» y lo empezó a derramar a los asistentes que se encontraban las cerca del escenario.
Siguieron presumiendo sus nuevos temas ya que su primer sencillo se hizo presente. «Cosas Peligrosas» invadía la energía del lugar. Siguieron con rolas de la Invasión de los Blátidos con «Necesito Cirugía».
«Qué cirugía ni que la ching*da, más que buenas ¡gordibuenas!» – Fors
Y «Gordibuenas» del disco «Con Pelotas» empezó a invadir los oídos de los asistentes. Cuca se estaba entregando a su público como siempre. José no pudo contenerse en pedir «Un Besito» de su disco Semen, cuando entró la guitarra de Alex Otaola a interpretarla.
Después un tema de su primer disco, favorito para muchos, recordó las épocas prematuras de Cuca, «Qué Chingaos» puso a brincar a todos. «Rock y Solo Rock» hizo lo propio.
«Esta canción es del mal milenarion que han tenido el gobiernon y la religión…» -Fors
«Fe de Ratas» la canción de protesta de Semen fue la mencionada por José. «El Mamón de la Pistola» coreada por todos y «Mujer Cucaracha» fueron los siguientes temas.
Ya había transcurrido más de la mitad de la presentación de Cuca en el Metropólitan, y el alma joven (ni tan joven) de la banda se vio reflejada en la letra del próximo tema «Tan Pedo». Que habla sobre una incomoda situación de un semental (ni tan semental) que sufre de una perdida de ego.
«Me robe la letra de esta canción, yo ni sabía que existía […] Artista que no roba material de otro artista, que levante la mano… Sure…» – Enfrentó al público José con simpatía.
Se refería de uno de los sencillo de su penúltimo álbum La Venganza de Cucamonga: «Más Daño». En seguida la única invitada de la noche subió a tarima para interpretar una de las canciones nuevas. Era María Barracuda con las ganas de diferenciar a las feministas con las «Feminazi».
Ya con el calor a tope un blues retorcía la guitarra de Otaola era el intro para «Alcohol y Rock n’ Roll» pegadita le pisaba los talones la rola que homenajea al baterista de Cuca. «Implacabe» fue de las favoritas de la noche.
Para la recta final, Cuca puso todo el arsenal más pesado (respecto a popularidad) en el setlist. Alex había cambiado su guitarra eléctrica por una acústica, sabíamos que «La Balada» sería la siguiente canción. Y lo fue. Tremendo tema para en vivo. Siguieron con una de la invasión; «La Pucha Asesina» era la que pondría a incomodar a las almas más conservadoras. Para «terminar» decidieron cerrar con «Srita. Cara de Pizza» que puso a cantar, brincar y sudar a todos.
El famoso encore nos puso a descansar garganta. Ya de regreso Cuca a su oficina (el escenario) interpretaron «Mátame Antes», «Don Goyo» y «Tu Flor» sin embargo solo fueron unas pequeñas estrofas de los temas mencionados. Pero con igual de fuerza que siempre.
«El Son del Dolor» fue la predilecta para cerrar el concierto. Con toda la euforia acumulada y el largo recorrido era el momento de éxtasis para la mayoría de los asistentes. Cuca prometió y cumplió. Derramando un par de descendencia en el Metropólitan y todos salimos con ADN blátida de nuevo.