Ilustración por Roberto López

El regreso a clases ya está aquí. Lo queramos o no, tenemos que pasar por el mismo proceso una vez más: «¿Cómo te llamas?», «¿Qué esperas aprender?», «¿Cuál es tu pasatiempo?».

Preguntas que nos han hecho durante toda nuestra vida y sorpresivamente, nunca estamos listos para dar una respuesta correcta, debido a la traición nervios o la posible expectativa que queramos generar.

El rock siempre tiene la respuesta, y para el regreso a clases no es la excepción. En Revista Kuadro hacemos un recuento de lo que puede llegar a ser esa primer semana de clases, con mucho rock.

 

Domingo

El verano se terminó y con él se quedó esa libertad que creíamos tener. En sólo unas horas comenzará un nuevo ciclo en tu vida y la incertidumbre es lo que causa que no podamos dormir de los nervios. En realidad nadie está listo para lo que le depara en el próximo año (o semestre) escolar, pero al menos podemos intentarlo y verlo como una oportunidad para empezar de nuevo con el pie derecho, llenar nuestra mochila con expectativas y metas.

 

Lunes

Listo o no, llegó el primer día de clases. Probablemente tuviste que reunir todas las fuerzas del cosmos y un poco más para poder levantarte de la cama este día, y no es para menos ¿quién le dijo a las escuelas que una persona normal puede prestar toda su atención a las 7 de la mañana? Aunado a los desvelos veraniegos de series, videojuegos y fiesta, llegar a tiempo a tu primer día de clases es un logro muchas veces menospreciado.

 

Martes

Sobreviviste el primer día, felicidades. Volviste a encontrarte con viejos colegas y viste el panorama en el que te estarás una gran parte importante de tu vida. En la escuela es donde muchas veces encontramos a nuestro primer amor, ese que nos va a marcar para el resto de nuestras futuras relaciones, o tal vez sólo sean las hormonas alborotadas listas para explotar en cualquier movimiento en falso. Puede que tus compañeros o compañeras no sean precisamente la flor más bella del ejido para ti, ¿pero has visto muy bien al rededor? Buen día, nueva maestra.

 

Miércoles

En este punto todo puede ir muy bien o muy mal, pero tranquilo, disfrútalo que esto es sólo el comienzo. Estás a tiempo de que todo mejore y sacarle provecho a esta etapa de tu vida porque, créeme, la extrañarás cuando termine.

 

Jueves

El fin de semana está cada vez más cerca que casi podemos olerlo. Esas ansias de salir corriendo son potenciadas por ese maestro que, lejos de acercarnos al conocimiento, se aferra porque desarrollemos un odio pasional a él, e inevitablemente a su materia —pedagógicamente, un error fatal—. Sí, te lo repiten hasta el cansancio: «no hay pregunta tonta, hay tontos que no preguntan», pero veámoslo desde otra perspectiva, cuestionar a la autoridad es un muy buen ejercicio para formar criterio y ejercitar tu argumentación, no dude usted en preguntar.

 

Viernes

Lo lograste, llegaste ileso al comienzo del fin de semana. Evidentemente no se compara al último día de clases antes del verano, pero es algo. Sin duda aprendiste, conociste y experimentaste cosas nuevas que ningún verano te puede dar. Es momento para hacer una reflexión sobre dónde estás y hacia dónde quieres ir, aunque eso puede esperar para más tarde, es viernes y parte del crecimiento es la recreación —guiño, guiño—. 😉

 

Sábado

Levantarse tarde y desvelarse, son el lema de todos los sábados a partir de ahora. Sin duda el fin de semana es esa válvula de escape que todos necesitamos para poder recargar la pila que gastaremos entrado el lunes. Algunos optan por la fiesta y el alcohol, otros por placeres más hedonistas de cama y comida chatarra y quizá convivencia sana con familia o amigos, pero no se nos puede olvidar lo más importante para que el fin de semana sea memorable: «Rock & Roll All Night and Party Every Day»