Fotografía destacada: Cortesía
Morabeza Tobacco es el resultado de una colaboración entre Gustav y Vanilla, ambos músicos de Estocolmo, quienes se conocieron en un club underground donde Vanilla estaba haciendo un DJ set. Después de hablar un poco más, se dieron cuenta que de ahí podía salir una colaboración bastante interesante, así que se juntaron para hacer Morabeza Tobacco, nombre que proviene de una pequeña tienda de tabaco de la capital sueca llamada Morabeza Tobak.
Esta colaboración ya tuvo su primer fruto en forma de un álbum nostálgico de pop Lo-fi, que lleva el mismo nombre de la banda, y para hablar un poco más de todo lo que rodea a estos músicos y a este disco, platicamos con Gustav.
Morabeza Tobacco es el primer proyecto en conjunto de la banda, y para ambos ha sido todo un viaje crearlo. Se tomaron su tiempo para pensarlo y hacerlo, especialmente en una colaboración donde muchas veces no estaban de acuerdo, pero como ambos estaban totalmente comprometidos a terminarlo, lo hicieron lo mejor posible.
Lo mejor de esto, como menciona Gustav, es que no sólo trabajaba junto a Vanilla, sino también cerca de muchos amigos y personas que los ayudaron a direccionar el disco. Cada canción intenta atrapar un estado de ánimo, un sentimiento o un recuerdo y esperan que nosotros al escucharlo agarremos eso también, al final, eso es lo que querían lograr.
“Para mí, este álbum significa muchas cosas diferentes, como el pasarla bien con los amigos con los que trabajamos, pero también muchos recuerdos. Siento que una gran parte de mi vida está puesta en este disco, y se siente fantástico.”
Pero no nos quedamos sólo en la música, la banda también lanzó el video de su canción “Ally McBeal” que fue grabada en la isla de Fårö, la cual ha sido escenario de varias películas importantes, como “El Séptimo Sello” del director Ingmar Bergman y que tiene algunas referencias de esta, y de muchas otras con las que Vanilla y Gustav crecieron así que ellos decidieron hacer su propia película, muy al estilo de las francesas de la década de los setentas, que habla de la relación de una pareja que se mueve y baila por toda la isla.
Sin embargo, la grabación no fue miel sobre hojuelas, ya que durante el día llegaban apenas a los dos grados centígrados, así que a veces el frío podía más que ellos, quienes no podían abrir las manos en algunos momentos. “En la noche todo era mejor, estábamos en una pequeña cabaña, tomando vino, cocinando y viendo algunos de los clips de ese día, con nuestros amigos reunidos, así que grabar ese video fue parte divertido y parte no”, recuerda Gustav.
Por ahora, podemos seguir esperando más música y shows en vivo de Morabeza Tobacco, así como otro video de una de las canciones de su álbum, y mientras todo esto sale a la luz, puedes escuchar su álbum homónimo en plataformas de streaming, y sentir como su suave Lo-fi te lleva por el camino de los recuerdos.