Expresar tus sentimientos no es fácil, o al menos no lo es para algunas personas y es entendible. Tal vez no a todo mundo le gusta compartir esos detalles o simplemente no tiene la necesidad de hacerlo.
El caso de Samia es uno que tal vez se siente que se ha visto antes en la música, pero tras una inspección más cercana podemos ver lo contrario. Energía inmensa en el escenario, movimientos bruscos, contorsiones, sentadillas; no es necesariamente lo que está en el papel de “canciones tristes”, pero eso hace a Samia una artista tan intrigante, ese contraste entre la expresividad de un frontman de los 80’s y la vulnerabilidad de artistas como Elliot Smith y Kurt Cobain.
Platicando con Samia no necesariamente vemos todo lo que la hace una cantautora o artista, sino que vemos lo que la forma como una persona que ha captado todo lo que le gusta de la música y lo enfoca a lo que ella necesita. Con su álbum debut The Baby, su más reciente EP, Scout, y un tour preparado para el próximo otoño, Samia se expresa y se acerca a quienes la escuchan y sienten lo mismo que ella.
«Estuve muy emocionada porque todo esto estuviera pasando [el regresar a tour y lanzar música como Scout] y, ahora que está pasando, se siente muy raro. Pero estoy muy agradecida de que tengo la oportunidad de hacerlo de nuevo. Ya me acostumbré a sentarme y quedarme adentro entonces va a ser un cambio interesante», menciona.
Samia viene de una familia muy cercana a la industria del entretenimiento y eso le dio sus primeras experiencias escuchando música, específicamente la de los musicales teatrales. Pero la pasión por ese arte no llegó necesariamente de las obras de teatro, sino del campamento musical, lugar en donde las influencias más inesperadas se hicieron presentes, al respecto comenta:
«Siempre he tenido música cerca. Muchas de las canciones que escuché mientras crecía sí eran muy adentradas al teatro musical y agradezco haber tenido esa influencia debido a la importancia que tiene la narración y las historias en las letras de esas canciones. Fue hasta que entré al campamento que empecé a tocar música por mi cuenta y se sintió como si ese era el lugar en donde todas las personas “inadaptadas” de la escuela eran enviadas a este campamento en Orange County, California, y esas personas nos mostraban a Nirvana, Elliot Smith y Daniel Johnston. Creo que fue ahí en donde encontré mi autonomía musical en cuanto a cómo escuchaba y escribía música.»
La exposición a la música no solo le dio un inicio a la carrera de Samia, sino que también le abrió puertas y posibilidades nuevas a la hora de expresarse. El escuchar artistas con una forma tan emocional de crear arte le hizo ver la importancia de las emociones, así como la de abrirse al mundo y abrazar su vulnerabilidad dentro de su arte.
«Cuando era niña era muy emocional, muy sensible, naturalmente me dejaba llevar mucho por mis sentimientos. Fue un gran alivio el saber que había otras personas que hacían lo mismo en el mundo y eran aceptadas y motivadas a hacerlo, llegando incluso a ayudar a otras personas al ser honestas con respecto a sus sentimientos. Eso es algo que siempre me ha cobijado, escucharlas ser tan abiertas y específicas con lo que sienten, incluso si es algo con lo que no me puedo identificar al cien por ciento. Si alguien habla sobre el día que tuvieron y hablan de él a detalle es algo que creo que es hermoso, el escuchar los pequeños detalles en las vidas de estas personas», relata la cantautora.
La forma en la que Samia construye su música está muy enfocada en contar historias y tener una base lírica antes de algo musical. A veces eso resulta en letras y situaciones muy específicas, pero aterrizan cuando la música entra en el sitio indicado. Igualmente, las influencias musicales no aparecen al principio, pero se adaptan al momento en el que ella las requiere.
«Principalmente me guío por la historia o algún poema y lo que sea que está pasando sónicamente trata de apoyar y acomodar a esa historia de la mejor manera. Creo que las influencias llegan después. Pienso que la razón por la que hago música es porque siempre me ha gustado cantar y escribir poemas, entonces lo que pasa alrededor de eso solo es una forma en la que me puedo permitir hacer eso. Tampoco quiero sentarme y decir “Oh, quiero escribir una canción que suene a tal artista” o lo que sea, aunque luego termina siendo así y eso es algo que puedo ver después. Con Scout pasó así, ya que lo tenía hecho me puse a ver mis playlist del verano y empecé a hacer las relaciones.»
The Baby fue lanzado en medio de la pandemia, pero Samia tuvo la oportunidad de crear el álbum y completarlo poco antes de que el panorama cambiara. Scout fue un poco diferente, no solo por ser un EP, sino también por realizarse de una forma mucho más espontánea y despreocupada.
«Fue un proceso totalmente diferente a lo que me hubiera imaginado alguna vez. The Baby fue muy planeado e intencional. Me tomó mucho tiempo el tener las canciones y saber que estaban listas para grabarse. Luego pasé meses grabando en estudios. Scout fue improvisado. Definitivamente es un reflejo de lo que pasaba en el momento. Las canciones se hicieron con base en notas de voz que tenía. En ese momento se sentía que el mundo entero se iba a terminar, entonces hicimos lo posible para hacer al proceso más divertido y libre.»
De igual forma, ella ve a sus fans como conexiones muy significativas, incluso si ella no tiene la oportunidad de conocer a todas esas personas individualmente. Son un escape para la cantante, y una forma de ver cómo su música logra hacer lo que sus influencias hicieron antes de ella, lo que la motivó a crear arte. Igual son personas muy atentas a los detalles, o al menos cuando tiene que ver con las letras y elementos que la cantante usa en su música y vaya que se lo hacen saber a Samia.
«Estoy muy agradecida por ello. Cuando tengo la oportunidad de conectar con estas personas con la música. Incluso cuando era adolescente me sentía de esa manera con las bandas que escuchaba y eventualmente pude darme cuenta de que estaba logrando hacer lo mismo. [Hablando de los tweets y memes] Creo que eso viene de que hago referencias muy específicas de mis canciones y de alguna forma se burlan de ello. Ponen una foto de una rueda gigante o un peluche de cerdo y se imaginan que llegue el momento en donde lo vean en la vida real porque es justo lo que dije yo en alguna canción. A veces me doy cuenta que soy tan específica que ya solo digo cosas que tienen sentido para mí.»
Samia ve con emoción el futuro en su carrera, Scout lleva poco tiempo lanzado pero ha logrado crear expectativa para lo que la cantante pueda traer después y el tour por Estados Unidos en el otoño parece ayudar aún más con eso. Eso sí, está segura de que se concentrará en hacer otro álbum, aunque es probable que tengamos que esperar un poco.
Voy a hacer otro álbum pero seguramente tomará bastante tiempo. Quiero planear algo bien de nuevo, fue divertido hacer un EP de una forma más improvisada pero creo que voy a dedicarle más tiempo y energía a esto que sigue. Es fácil para mí escribir mientras estoy de gira entonces espero conseguir algo de ahí para que después pueda hacerlo.
Scout está disponible en todas las plataformas. ¡Chécalo aquí abajo!
TXT: Edson Peralta