A mis padres
Seguramente no conoces a esta agrupación fundada en 1954 por el recientemente fallecido Quique Lucca; no te culpo. La salsa creada en Puerto Rico, y que podría denominar como de una calidad superior a la más conocida, deben este título a La Sonora Ponceña. Te ruego, lector, no caigas en un prejuicio: no todos los conjuntos que llevan en su nombre la palabra «sonora» solo corresponden a los gustos de los señores que se quedan añorando el siglo pasado y sus glorias; tampoco por los géneros musicales que ejecutan y crean deben ser dejados a un lado. No todo lo que emana del rock es oro y solo que lo emana de él lo es.
Este conjunto es una leyenda dentro de la música latina. Son pertenecientes a una generación que hizo temas memorables para la salsa, me refiero a: Rubén Blades, Héctor Lavoe, Celia Cruz, Willy Colón o Rey Barreto. Sin embargo, en su alineación se encontraban otras grandes estrellas, entre ellas, su actual director e hijo del fundador, el maestro del piano Papo Lucca.
Por iniciativa de él, la década de los 80 para la agrupación fue crucial pues a partir de ahí fueron catalogados como un proyecto más internacional: los títulos eran en inglés, el arte de las portadas rompían con todo el arte de las portadas antes creado. Estas ilustraciones, amadas por unos y repudiadas por otras, fueron concebidas por Ron Levine y le dieron otra cara a La Sonora Ponceña. Sin embargo, un aspecto olvidado es que en estos álbumes se incluyó un tema de jazz. Si quisieron ser una orquesta de salsa fuera de lo común, definitivamente lo lograron.
Es por eso que te presento este #TopKuatro de los mejores temas de jazz, necesariamente, latino de La Sonora Ponceña. Déjate llevar por la improvisación y la impecable ejecución de los también llamados «Gigantes del Sur»:
