Fotografías: Dora Méndez
El imperial es reconocido por su ambiente casual y contar con la presencia de excelentes talentos propuesta; de esto trató anoche. Burghost y VRNS fueron parte de una dupla que se presentaron ante un público que esperaba pasar la madrugada moviendo sus cuerpos electrónicos.
Burghost
La banda que comenzó la noche fue Burghost, una propuesta nueva liderada por Fernando Burgos juntos a Hector y Juan Pablo, mismo equipo que anteriormente habían participado en proyectos como Hello Seahorse! y Sami Ayuka. Así fue como la cortina abrió y los sintetizadores comenzaron a sonar.
La concentración fue algo que caracterizó a los chicos sobre el escenario, siguiendo el ritmo de cada uno de sus instrumentos, mostraron al público 45 minutos de notas electrónicas seguidas. Fue todo un viaje a través de sonidos con diferentes humores y acompañada de un televisor que reproducía líneas distorsionadas atrás de la agrupación.
Todo fue ejecutado en vivo, como consecuencia el ambiente se contagió casi de manera inmediata. Los cuerpos no dejaron de moverse, balanceándose y unos más subiendo las manos como en un disfrute total.
Pudimos escuchar más de 5 canciones, que aunque no lo expresaron, seguramente formarán parte de su tan esperado álbum debut. Estamos seguros que están listos para ganarse un buen número de fans y dejar que más gente viva su experiencia.
Terminando Burgos agradeció a todos y se despidieron bajando del escenario.
VRNS
La noche para VRNS, o Luis Cortés (Tolidos) en su proyecto solista, comenzó a la media noche interpretando su tema «No es amor», mismo que forma parte de su primer EP Viernes.
Como es costumbre el artista interpretó cada uno de sus temas con energía y sintiendo sus letras al pronunciarlas. De esta forma pudimos disfrutar de «Secretos», su canción más escuchada en las plataformas digitales y sin duda de las mejores.
Entre el público sólo se veía a chicas y chicos moviéndose al ritmo electrónico, y otros más cantando. VRNS expresó su felicidad con un «ay cabrón» y presentó su siguiente canción.
«Bailando en la obscuridad» se convirtió en una de las mejor recibidas, sin duda, un buen ritmo; sintetizadores y guitarras sincronizadas que dieron paso a este tema y su respectivo éxito en vivo.
«Todo lo que no mataste» y «Castillos de mentiras» continuaron la madrugada de este sábado. Luis Cortés demostró su profesionalismo, donde a pesar de algunos fallos de audio, él siguió con todo el ánimo haciendo que se olvidara y que la gente siguiera en sintonía con su música.
Con su guitarra en mano, agradeció a todos esa noche por su apoyo y presentó su última canción, cerrando así con «Vidrios Rotos». Después de todo y al cerrarse la cortina, cada quien se quedó con ganas de escuchar más de VRNS, pero seguro próximamente nos podría darnos la sorpresa de algo nuevo.