Algo pasa con Marron 5 es que, seas quien seas o o género música de tu preferencia, has escuchado mínimo una canción de ellos. Y seas quien seas sabes que el ese Adam sabe cómo poner a temblar tu heterosexualidad o tu fidelidad respectivamente. Y seas quien seas TODOS nos queremos mover como el ese Jagger. ¿Se imaginan todo eso junto?
Dejando de lado que unos tales Motel completamente olvidables salieron a quién sabe qué intentando abrir un show así, creo que todos sabíamos que nos íbamos a «Moves like Jagger», pero no sabíamos que después nos darían este amor: en gringo «This Love». Es que da un montón de gusto ver a una banda que, de manera sigilosa, hasta calladita si gustan, sólo se dedica a trabajar, a componer, a tocar, y eso conecta. Sí, la presencia de Adam es indiscutible, pero es que no es él sólo, se necesita un equipo para un espectáculo de calidad mundial. Que aunque corras por todo el escenario, haya quien te respalde. Este fue un espectáculo y no mamaQUE DIGA, fingimientos. 19 canciones de pura felicidad, de gritos, de coros, de sonrisas. Se puede hablar de modo experto o indolente sobre la música, pero es completamente irrebatible que Marroon 5 es icónico, pero ya no sólo por las leyes inquebrantables de la mercadotecnia y la industria, sino por un montón de trabajo y de talento que los respaldan. Y sí, Levinechiquitobebésexy, sí, pero por eso es el vocalista de una banda y no sólo un modelo. Se ve ya de edad, pero en el Foro Sol se nos olvidó a todos. La verdadera nueva normalidad se da en conciertos como este, donde uno puede no ser tan fan, pero también puede uno no salir decepcionado.
«Es genial estar de regreso con ustedes, los extrañamos mucho«, dijo mientras hacía una seña de abrazar. Y sí que se sintió, sobre todo cuando se empezó a quitar poco a poco la chamarra.
Al hilo siguieron «Animals», «What lovers do», «Makes me Wonder», «Wait» y «Maps».
¿Mi favorita? Después de un sorbito de algo que no podría asegurar que fuera agua, vino «Harder to Breathe», y era lógico, porque con esa los conocí, porque me parece el verdadero rock, pero sobre todo, porque me recuerda que trabajo es más importante que suerte.
Qué concierto. Qué banda. Una de las pocas que demuestran que se puede ser sexy, pero que eso no dura para siempre, y que el trabajo, la constancia y la música tienen que imperar para poder trascender, que no es gratuito ni aleatorio llenar un Foro Sol.