Y tú, ¿te acuerdas qué hacías hace 14 años?
Han pasado justamente todos esos años desde la última entrega de A Perfect Circle, con su álbum eMOTIVe y sí, la espera ha sido muy larga, básicamente toda una generación musical y desde luego social se ha trasformado, pero ¿la banda esperó todos estos años para inspirarse en toda esta transformación y poder lanzar un disco?
La realidad es que no, las mentes principales Maynard James Keenan y Billy Howerdell, se dedicaron en este tiempo a sus demás proyectos, tanto personales y musicales, a pesar de que en 2008 se hablaba de un nuevo material de APC tuvieron que pasar 10 años más para que esto se volviera realidad.
Sin querer, todo este tiempo que ha pasado ha servido de inspiración para el contenido de éste, pues los temas principales son sociedad, política y espiritualidad. Es abordado sobre cómo es que el hombre ha cambiado en poco más de una década en todos estos aspectos y esta protesta expresada en versos líricos llega bajo el nombre de Eat The Elephant, cuarto álbum de estudio al que le podemos denominar un auténtico viaje astral.
Cuenta con cuatro sinlges, el primero de ellos “The Doomed” lanzado en octubre del año pasado, éste ha alcanzado su punto máximo en el número 19 en el Billboard Hot 100, para el mes de enero y febrero del presente lanzaban “Disillusioned” y “Talk Talk”, respectivamente, por último a principios de abril dieron a conocer «So Long, and Thanks for All the Fish”, previo al lanzamiento de este material.
Si nunca has escuchado a la banda y esperas algo pesado, olvídalo, en este álbum no hay nada de ello (aunque suene mucho a Tool), hay mucha variación en la intensidad de cada uno de los temas, podemos ir desde lo más melódico hasta lo electrónico con temas como “Hourglass”, el cual hace erizar la piel con los efectos robóticos de voz y sintetizador. Siendo fiel a su estilo, la banda mantiene su sonido característico, eso sí, a diferencia de otros materiales, predominan más los teclados que la misma guitarra.
El señor Maynard y su imponente voz nos traslada y guía a lo largo de todo el disco. Una voz con mucha esencia y que te transmite emociones, un estilo único y característico en él, realmente es de escuchar este disco en un entorno tranquilo y de paz para dejarte llevar en este viaje de protesta, pues la desigualdad social, la farsa en la política y el hombre que se ha olvidado de ser hombre, son justamente lo que estructura esta obra.
Aquí como en las películas, no podríamos hablar del final, pues deberás sacar tus propias conclusiones, escúchalo y pensarás en un futuro tanto para el mundo como para la banda, solo podemos decir que valió la pena la espera.