Fotos por César Vicuña
Desde que estaba en Fifth Harmony, Camila Cabello destacó entre sus compañeras no solo por su talento, también por el carisma, la sencillez y el orgullo latino que la caracteriza. Es por eso, que el pasado lunes 24 de septiembre se robó los corazones de todos los asistentes a su concierto en el Palacio de los Deportes.
Aunque la cita era a las ocho de la noche, este comenzó 30 minutos tarde. Después de apagar las luces, comenzó un video con un largo intro de “Never Be The Same”, nombre que también lleva el tour con el que ha recorrido ya varios países.
Al entrar ella al escenario, los gritos de sus fans fueron inevitables. Al unísono cantaban el público y Camila. “Hola, mi México. Bienvenidos al Never be the same tour” e interpretó “She Loves Control”. Es fascinante como aun bailando, podía alcanzar las notas más altas y agudas de sus canciones. “Esta canción se las dedico a ustedes, mi México” dijo antes de cantar un pedazo de “Can’t Help Falling in Love” de Elvis Presley.
“Cómo hoy es una noche especial, quería invitar a un gran amigo mío. Es una voz espectacular y tiene un talento increíble” y Noel Schajris apareció en el escenario con su teclado. Juntos cantaron “Consequences” y “Entra en Mi Vida”, canción que a pesar de tener más de 15 años, la mayoría del público se sabía.
Antes de seguir con “All These Years” contó que, familia, incluyendo a su padre, y amigos estaban acompañándola en este primer concierto como solista en México. Continuó con “Something’s Gotta Give” usando de fondo fotografías y videos de #MarchForOurLives, movimiento estudiantil originado a partir de los tiroteos en escuelas secundarias en Estados Unidos.
Cuando creían que no le quedaba mucho al concierto, Camila presentó a unos segundos invitados especiales. Se trataba de Jesse & Joy, con quienes cantó “Corre”. Prosiguió con “Real Friends” y prendió al público al interpretar “Know No Better” de Major Lazer, donde ella colabora como artista invitada.
Siguió con “Crown” e “Into It” y se despidió del público mexicano. Por supuesto nadie creyó que eso fuera todo, así que todos permanecieron en sus lugares. Entre chiflidos y gritos, regresó Camila con un moño mexicano colgado del cuello. Bailó y cantó “Sangría Wine” sencillo de Pharrel Williams que cuenta con la participación de la mexico-cubana.
“Havana” por supuesto no podía faltar, fue su primer sencillo y tiene más de mil millones de reproducciones en plataformas digitales, razón por la cual compartió una nueva versión en vivo desde su concierto en Londres y fue la que interpretó esta noche.
“Normalmente cierro mis shows con ‘Havana’ pero estamos en México y quiero que esta noche sea tan especial para ustedes como lo es para mí”, dijo y en seguida subieron mariachis y comenzó a cantar “México en La Piel”, interpretó un par de estrofas sola antes de que Alejandro Cabello, su padre, se incorporara al escenario para cantar con ella, acción que conmovió a todos sus fans.
“¡Viva México, cabrones!” gritó y cerró este fabuloso concierto, superando las expectativas de muchos.