De la locura electrónica de su debut bajo el nombre de Odisea, la honestidad pop de Rebeldes y la conciencia social bajo un fondo house de Amiga, acá el músico chileno Alex Anwandter, aglutina sus inquietudes, y expande su sonido con creaciones capaces de captar la atención de distintos públicos latinos.

 

Adelantado con el single “Locura”, este es un disco que se deja lucir con cada nueva pasada. Once canciones en los que nuevamente traduce lo que pasa en el mundo, incluyendo temas de género e identidad latinoamericana, y que suma dos covers del cancionero popular brasileño: “Um Girassol da Cor de Seu Cabelo” (de Milton Nascimento y Lo Borges) y “Olha María” (de Chico Buarque).

Latinoamericana es una audaz mezcla de ira, irreverencia, clasicismo, modernidad, energía, melancolía, baile y delicadeza, destinada a remover conciencias y emociones en torno a cuestiones tan fundamentales política y socialmente como la identidad de género, la identidad sexual, la identidad de los pueblos de América Latina y la identidad de clase. Todo eso cabe en esa fantástica canción en la que, entre ecos disco y funk de los 90, Alex lamenta su inacción ante un “mundo que se va a la mierda” y a la vez se siente a punto de estallar: es entonces cuando -una suerte de diálogo del artista consigo mismo como espectador–, conduciendo de manera iracunda con una escopeta al lado, el ex-Teleradio Donoso pasa a la acción… y se pinta los labios con carmín.

La agitación es uno de los motores de ‘Latinoamericana’, como muestra de manera evidente en diferentes canciones del disco. Temas que destruyen a las barreras interiores, los prejuicios que a todos se nos han inculcado de una u otra manera y que es necesario derribar (“si botamos el muro, lo botamos entero / empezamos de cero y lo hacemos bien”) para construir esa sociedad mejor que urge. “La vida se va / hagamos que valga la pena”, canta Alex al final del estribillo, con una de las frases más emotivas del álbum.

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