Polaris es un proyecto fresco originario de la CDMX conformado por Pablo Cantú (baterista de Reyno), Santiago Carranza, Patricio Dávila y Diego Rosas, todos músicos experimentados en algún campo de la producción, que llegaron para ofrecernos un sonido pop relajado con muchos toques de distintos instrumentos y otros tantos efectos electrónicos.

En vísperas de estrenar su primer LP en un show con Adán Jodorowski este 14 de diciembre en el Auditorio Plaza Condesa, platicamos con Pablo acerca de todo lo que significa esta nueva banda y lo que tienen preparado para los próximos meses.

Polaris se formó bajo la necesidad de Pablo de expresar cosas más personales que no iban con el concepto de Reyno, además de jugar en faceta de escritor y cantante: “a veces hacía canciones por mi cuenta que decía ‘puta, esto está buenísimo’, pero no podía sacarlas porque tenía que estar pegándole duro a la batería. Polaris es más lúdico, tenemos una libertad de ir descubriendo qué somos”.

Siempre tuve la idea de que no importa quién cante, quiero tener colaboraciones distintas como lo hace Gorillaz, que tienen muchas voces lideradas por Damon.

De 2017 para acá, el cuarteto ya lanzado cuatro sencillos que verdaderamente reflejan lo que Pablo dice. Por ejemplo, “Voz de Marte” y “Parte de Mí” juegan con algunos sonidos acústicos como de trova, mientras que “Delirio” es mucho más pop, electrónica y bailable. El líder asegura que el sonido general de Polaris está inspirado en el rock argentino tipo Charly García y el del gran Frank Zappa. “Lo único que tenía claro era que tenía que dejar de tocar la batería para que sonara diferente a Reyno”.

Aparte de la música, Polaris quiere ir un paso adelante en cuanto a shows en vivo. El 14 de diciembre presentarán el LP con todos estos sencillos al lado de Adán Jodorowski en un show que promete una gran producción escenográfica, pues han estado trabajando con una reconocida escenógrafa: “habrá dos conceptos con Adán que serán como contrapartes. Con Polaris tengo claro que quiero hacer una experiencia diferente y abstracta tipo Talking Heads con una producción casi cantada a capella, me quiero aventurar a otros horizontes y podre cagarla a gusto. Quiero invertir en locuras escénicas”, dijo Pablo.

Polaris es ligero, con cierta bobez y palabras como ‘burbujas’ y cosas románticas, cursis pero de broma.

Este concierto será el parteaguas oficial antes de que empiecen a hacer un tour completo, pues hasta ahora solo han hecho unas cuantas fechas al lado de la banda argentina Indios, y la gente los ha recibido muy bien: “me escriben mucho. En realidad el feedback ya es más por redes y en mi Instagram comparto muchas cosas. Veo mucho entusiasmo y buena onda de parte de la gente que ya quiere que salgan las demás canciones”.

Como banda, Polaris quiere dejar el mensaje de aligerarse la vida sin que deje de ser profunda. Dejar atrás buenas dosis de drama, llevar todo más light y remarcar la alegría de vivir. Para 2019, quieren hacer un concierto propio en el Lunario y tocarán en algunos festivales que próximamente se revelarán. No les pierdas la pista.