Fotografías: Cortesía

Chris: La música es un puente divino entre el pasado, el presente y el futuro, una forma única de conexión, un acto de sensualidad eterna que da los momentos redentores de la vida.

Lewis: Esa es una buena forma de ponerlo, creo que proviene de una forma de no comprarte la historia que te han dicho o vendido. Te reservas el derecho como poeta o músico de hablar de la verdad como tú lo ves y sientes y juegas con las limitaciones del mundo que se te presentó. Como dijo Picasso “el arte quita del alma el polvo de la vida cotidiana”.

Basta leer un poco de las respuestas a esta entrevista de Chris y Lewis, quienes junto a Julia, forman Oracle Sisters, para entender cómo es que se desarrollan dentro de la música, el camino creativo que llevan y el paso por su EP debut “Paris I”.

Sin género establecido, ni ganas de etiquetarse con uno, Oracle Sisters se creó en el 2017 cuando Chris y Lewis, amigos desde niños, se reunieron en París después de casi 10 años de separación; el reencuentro sirvió para descubrir la oportunidad real de hacer florecer un vínculo creativo que había existido desde su infancia.

“Eso en sí mismo ha sido un viaje inolvidable.”

Empezaron a tocar juntos con algunos otros artistas de una manera no tan permanente, mientras recorrían la nueva ciudad encontrando en su paso personajes inspiradores, entre ellos, Julia, baterista, compositora y cantante, con quien congeniaron rápidamente. De ahí en adelante empezaron a crear este EP, “Paris I”, que es una selección de canciones escritas en sus primeros años en París. Todo ese camino ha estado lleno de recuerdos inolvidables que me deja pensando, qué otras buenas historias estarán detrás de estas canciones.

Recuerdo enseñarle a Julia “Most of All” en nuestra primera tocada juntos y escucharla cantar armonías; escribir “The Vibes” con Lewis en Hydra rodeados de burros después de un viaje de ácido que nos condujo a tres gatos ciegos; a Julia mostrándonos su nueva canción “High Moon” mientras ensayaba en una bodega de jazz en las profundidades de las calles del tercer distrito y luego, por supuesto, llenando un coche viejo con nuestros instrumentos y dirigiéndonos a una granja en el suroeste de Francia para grabar el EP en un estudio de madera construido por nuestro amigo Pierre Marie.

Sin duda sus experiencias se impregnan en su música y empiezan a mostrar quiénes son y por qué su sonido es de tal o cual manera, por lo que no tiene mucho sentido encasillarlos en un género, aunque saben que la gente les ha dado la etiqueta indie “sea lo que sea que eso signifique exactamente. Indie parece más una marca que un género musical.”

Pese a todo, Oracle Sisters no es una banda experimental o que compone con total libertad, en realidad sus integrantres disfrutan de los límites y los obstáculos para trabajar creativamente ya que cuando se juntan, tocan y componen de cierta manera, pero al final todos tienen canciones debajo de la cama que saben que no tienen el sonido adecuado para la banda, pero es difícil señalar qué es exactamente.

«Es la interacción y el intercambio único entre tres personas. Eso en sí mismo crea algún tipo de sonido. La armonía de nuestras tres voces juntas, el ir y venir de ideas en las guitarras. Nunca antes había cantado con falsete, pero parece natural hacerlo con Oracle Sisters. En ese sentido el sonido sale gracias a la cantidad de canciones que comenzamos a escribir casi de manera inconsciente.»

Instrumentalmente, la banda trata de mantener las cosas simples, fluir con lo que se les presente y tomar la tradición popular “of not fucking around too much” –creo en inglés tiene mayor sentido-. La configuración de la guitarra eléctrica de Lewis es original pero minimalista, Chris toca principalmente guitarras heredadas o encontradas y Julia ni siquiera tiene una batería, así que utilizan eso para empezar a experimentar con su creatividad dentro del estudio, rebotando cosas a través de cintas, colocando amplificadores en lugares extraños, superponiendo cajas de ritmos y kits de batería.

«Es muy divertido dejarse llevar por un estudio como niños jugando. Sin embargo, no perdemos demasiado tiempo. Creo que es muy importante mantener las opciones limitadas y ver qué se puede hacer con eso de manera creativa. Tener una visión pero estar abierto a las sorpresas, y profundizar en nuestras propias producciones y explorar los límites de los arreglos musicales.»

Estas limitaciones, generalmente autoimpuestas, resultaron ser una forma excelente de impulsar su creatividad pero todo empieza por inspiración en gran parte de la que viene de todo lo que nos rodea: cine, fotografía, música de todas partes del mundo, poder viajar para cambiar o alimentar los sentidos, también incluye encontrarse a gente que son radicalmente distintos a nosotros, vernos obligados a cuestionar cosas que parecen absolutas y esto puede conducir a algunas respuestas artísticas interesantes y como dice Lewis “ver el mundo como un libro abierto es una gran fuente de aprendizaje”. Por el contrario Chris comenta:

«Pero es necesario no distraerse con exceso de información y desarrollar una capacidad de atención demasiado corta. Es fundamental estar inmerso. Un ermitaño en una cueva que solo tiene las colinas y el sonido del viento en los árboles puede alcanzar una fuente cada vez más rara de creatividad divina.»

Pasado este punto, encuentran a la creatividad como un sinónimo de libertad, y ésta siempre tiene obstáculos; tal vez para algunos, como para ellos, los obstáculos no son físicos, ni de vivir en un país donde no puedas expresarte o cosas peores, sin embargo, hay barreras en las vidas de todos, ya sea pagar la renta, superar la ansiedad, velar por la familia o tener espacio y silencio, “no son problemas triviales, sino una parte crucial del viaje creativo”.

Y una vez en ese camino de creatividad es cuando entra la composición, un baile entre las canciones y Oracle Sisters que se revelan unos a otros. Puede que la canción llegue a mostrar algo al escritor, como cierta ayuda para ponerle fin a un pensamiento o emoción y darle algo tangible que le pueda dar sentido.

“Luego llevas la canción a dar un paseo, la estiras y le das la vuelta y antes de que te des cuenta, están parados en un dive bar* juntos en Dresden completamente desnudos”

“O estar nadando en un dive bar con toda tu ropa puesta.”

Esas canciones, con un viaje tan largo y divertido, son las que integran “Paris I”, el cual pueden escuchar en cualquier plataforma de streaming, y cuyo único plan, es que el público se sienta animado.

De Oracle Sisters me voy con esta visión de la creatividad como un ente que fluctua entre ánimos y estados, conocimientos y silencios, y que necesita ser alimentado con información pero también con paz, silencio e introspección y muchas veces, la cereza del pastel será juntarte con personas que puedan ayudarte a desarrollar esa idea de una manera completamente original.

*Literalmente se traduce como bar de buceo que es un bar de mala muerte.