Salir de la zona de confort solo para reinventarse, no es algo sencillo y al final del día, los resultados obtenidos pueden no caer tan bien. En el caso de Thanks For Today de Death Cab for Cutie, las opiniones vuelven a dividirse…
Cambios y excesos…
Este nuevo material se compone por 10 sencillos que rompen con la melancolía dejada por Ben Gibbard en Kintsug. Iniciando por “I Dreamt We Spoke Again”, una de las canciones favoritas que comienza con el sonido del sintetizador, en un tono bastante alto que termina por funcionarse con su voz de una forma bastante agradable.
En este tema, Ben decide retomar la idea de ser un fantasma, solo para convertirla en una metáfora que habla sobre las visitas de aquellos recuerdos cariñosos y agridulces que resaltan con frecuencia en nuestra actividad nocturna.
“Quería escribir la canción sin ningún contexto. No hay indicación de cuál es la relación con la persona a la que se está cantando en la canción. Quería presentarlo de esa manera para que quedara abierto a la interpretación del oyente”, señaló en una entrevista. Pasamos a «Summer Years»; aquí la batería comienza marcando el ritmo para abrirle paso al sonido de la guitarra.
En “Gold Rush”, nos encontramos con una canción de protesta, —por así decirlo —, en la que Death Cab comparte su disgusto por el crecimiento urbano, excesivo e irresponsable de Seattle.
«Sé que el Seattle que mis padres recordaban no es el Seattle que conozco, y que estas cosas existen en un estado de constante cambio y cambio. La esperanza es que al menos parte de ese cambio pueda ser para mejor». Además, esta pieza fue construida e inspirada alrededor de “Mind Train” de 1982 de Yoko Ono y se convirtió en el primer sencillo en desprenderse de Thanks For Today.
Lo aprendido y la vista hacia adelante
Nos brincamos directamente a “Autumn Love”, una balada bastante alegre y con un coro pegajoso, que habla sobre la auto-liberación y la importancia de salir de nuestra zona de confort para encontrarnos con una mejor versión de nosotros mismos. Ben comparte que el tema habla sobre la dificultad que representa el no volverse un tanto introspectivo en algún punto de la vida.
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“Si tengo suerte, tengo tanto tiempo delante de mí como lo tengo detrás de mí. Existe este tipo de punto de no retorno y este elemento, en este momento de mi vida, de mirar hacia adelante y hacia atrás en igual medida, en oposición a cuando tenía 20 años y solo pensaba en el futuro”, comparte en una entrevista.
En “Northern Lights”, el teclado de Dave Depper comienza liderando la pieza para hundirnos en un poco de nostalgia. Esta te hará querer pegarte a la ventana en un día de lluvia, que te llevará a encontrarte con “You Moved Away”, una pieza dedicada al excéntrico Derek Erdman.
Paramos justo en “60 & Punk”, una de las canciones con un trasfondo fuerte y delicado; una canción dedicada a un héroe anónimo de Gibbard, quien lo guió en el adolescencia y terminó por convertirse en un amigo y mentor en la edad adulta,
De acuerdo con Gibbard, en esta canción aborda la lucha contra el alcoholismo de este superhéroe anónimo y las consecuencias del exceso. También resalta que los seres humanos, tenemos la mala costumbre de ver a nuestros ídolos, como una especie de superhéroes sin percatarnos que ellos, al igual que nosotros, están al borde de convertirse en víctimas de cualquier adicción; ya sea a las redes sociales, al alcohol, a la soledad…
La realidad es que Thanks For Today, es un buen regreso de Death Cab For Cutie, en el que podemos disfrutar una esencia y visión distinta de la vida de Gibbard y sus integrantes.
El principal reto de este disco era documentar, —de cierta forma—, la inestabilidad de la vida y sus consecuencias, la necesidad de cambiar y romper con la zona de confort pero sobre todo, documentar que todos somos más de lo que pensamos y que a veces es necesario mirar de manera interna solo para aprender, entender y emprender.
