Fotografías: Rodrigo Guerrero
El “Coloso de Reforma” se convirtió en un auténtico libro de cuentos, lleno de escenarios, colores y danza, protagonizado por la belleza y talento de Lindsey Stirling.
A pesar del caos vial y el toque dramático que pone la lluvia en la CDMX, los fans se dieron cita en el Auditorio Nacional para deleitarse con el show que forma parta del “Brave Enough Tour”.
Luego de que la cantante mexicana independiente Chela Rivas encendiera las emociones no pasó mucho tempo para que las luces del recinto volvieran a apagarse y así dar inicio a lo que fuera la primera página de este cuento con “Beyond the Veil”, desde el inicio Lindsey desborda carisma y una entrega total en cada coreografía, pues además de ser una gran bailarina, la ejecución de sus melodías con el violín mientras realiza los bailes es simplemente perfecta.
Los escenarios con las pantallas iban cambiando y con ello también los vestuarios para la interpretación de canciones como “Prism”, “Elements” y “Feeling Good”, que llevaría a un peculiar intermedio que demuestra la sencillez de Stirling para con sus fans, pues intercambio de palabras y hasta regalos recibió por parte de ellos.
Las páginas de esta historia iban pasando, realmente es como estar viendo una obra musical con la combinación de coreografías, fondos y luces, es claro que no es uno de esos conciertos a los que estamos acostumbrados y melodías como “Hallelujah”, “Crystalize”, “Hold My Heart” y “Mirage” te adentran más en ese mundo.
Es simplemente deleitarse con la belleza y talento de Lindsey, es aplaudir cada interpretación, es realmente un viaje que de pronto te puedes sentir en la ciudad, luego en un bosque, de pronto estás en un castillo y hasta dentro de una esfera de nieve, magia pura.
La noche termina con “Roundtable Rival/Don´t Lt this Feeling Fad» y con esto aterrizamos de nuevo en la realidad de lluvia y tráfico, al menos durante dos horas nos olvidamos de eso, y nos fuimos a lugares inimaginables, agradecida con sus fans, Stirling y todos quienes la acompañaron en el escenario hacen una reverencia a su público con la bandera mexicana y se despide prometiendo vernos pronto.
