Fotos: Martín Vargas

Casi media hora después de lo acordado la música se detuvo. Para quien es nuevo, la luz de El Imperial adorna de rojo el ambiente, bien está el decir que asemeja a un pequeño infierno; quizá un círculo si nos atenemos a la descripción de Alighieri. Pero aquí no había sufrimiento sino espera y expectativa. De la entrada comenzaron a aparecer los fanáticos que se aglutinaron en seguida cerca del escenario —también pequeño—.

Para aminorar la espera, charla y cerveza. Entre la penumbra rubí se distinguían algunos rostros: Eduardo Limón, amigo y ex conductor de La Noche W, programa radiofónico donde compartía micrófono con Rivera Calderón hace algunos años. También se encontraba ahí La Diva del Jazz en México: Iraida Noriega. Pero pasaban desapercibidos por el público que poco a poco llenaba el lugar. (Dicen que todo cabe en un huequito sabiéndolo acomodar).

En el telón negro donde se ocultaban los tres integrantes se proyectaban siluetas diáfanas de luz fría. Y así, de pronto, se abrieron las cortinas  para mostrarse ante la multitud  incipiente. Los tres, cada uno en su universo explosivo, se colocaron en su posición e hicieron remembranza de una de las viejas glorias del proyecto, quizá la canción más profunda y desesperada de todas: «Escalera», de La Hora del Tiempo (2005). La invocación de la poesía siempre está presente en Monocordio, pero para este tema es inevitable pensar en el «Poema XV» de los 20 poemas de amor y una canción desesperada del Nobel chileno Pablo Neruda.

«—¡A empezar bien el año!» Fueron las palabras de bienvenida de Fernando para los presentes. Posteriormente, entre canción y canción él daba un pequeño discurso introductorio, alternado por Alonso. José María se mantuvo en la parte posterior, pero cantaba con entusiasmo la canción en turno. Conforme las canciones fueron pasando el público observaba atento, a veces con solemnidad, a veces como hipnotizados, la explosión con la que Monocordio se mostraba en su presentación. Algunos ademanes, como los acercamientos entre la guitarra y el bajo en pleno éxtasis, recordaban a una época más temprana de Rivera Calderón; cuando El Cuerpo de Cristina. Digo sin temor a equivocarme que ahora hay más madurez en las letras de Monocordio, quizá menos instrumentación, pero se nota sinceridad en las canciones.

Pareciera que «Me Haces Existir» fue algo fortuito, pues su interpretación fue ‘a capella’, por denominar de alguna manera la ausencia de la guitarra que entonces estaba siendo afinada por el staff. Pero eso no detuvo a Fernando que en compañía de José María invitaron a los presentes a completar la letra de dicha canción, lanzada en El Primer Rayo de Sol (2006). Entonces se convirtió en «Yofo», la canción (propia) más vieja, y un bajeo estridente nació de los acordes de Alonso.

Al presentar «Un Beso de Tres», una de las canciones mejor logradas por el nuevo proyecto, los gritos no se hicieron esperar. «—¿Un beso a los tres?», desafió con coquetería una chica en medio del público. —Para quitar el estrés—, respondió Fernando con humor. Luego, en «Amar es Combatir», los versos recitados por Alonso le dieron sensualidad, no muy difícil de encontrar en la oscuridad escarlata de aquel lugar. Otro momento emotivo fue cuando Fernando lanzó vivas a dos figuras míticas de la música argentina: Gustavo Cerati y Luis Alberto Spinetta, de este último se interpretó «Bajan».

Entonces se acercaba el final y la canción encargada para tal fue quizá la más famosa de Monocordio: «Siempre Te Busqué», retrato fiel de un amor soñador. Para este último acto se invitó a que el público se aglutinara más cerca del escenario: hasta ese momento había cierta distancia entre el público. Al terminar la canción no hubo espacio para la súplica. La cortina traslúcida y negra de nuevo ocultaba su interior a los asistentes. Algunos se fueron, otros se quedaron a bailar; pero no sin antes recordarles que estarán en el próximo Vive Latino el domingo

Setlist:

• Escalera
• No Existe Más
• Si No Escucho el Eco
• Chicas en Bici
• La Vida de Un Beso
• Me Haces Existir/ Yofo
• Estoy Tratando
• Un Beso de Tres
• Amar es Combatir
• Triste Pero Feliz
• Bajan (cover de Luis Alberto Spinetta)
• Un Día De Esos
• Tú
• Siempre te Busqué