No todo el Hard Rock contemporáneo se hace en Europa, específicamente en Suecia. Todavía con los gabachos podemos encontrar grandes exponentes… y no es The Sword.
Desde California llegó una banda que parece salida de hace 40 años, que parece mas de esa resaca que tuvo la música del Summer of Love, que el de el EDM rige las estaciones de radio.
The Rival Sons esta activo desde el 2009, ya con cinco trabajos en el estudio, sobresaliendo desde el 2012 con Head Down donde el mundo se dió cuenta de su existencia (su tercer placa para los que van llevando la cuenta), confirmaron en 2014 con Great Western Valkyrie que era en serio y no fue un mero accidente. Hollow Bones que es el último LP confirma el tamaño de la banda, siendo el tamaño ideal para acompañar a Black Sabbath en su despedida, de ese tamaño.
Desde el disco pasado continúan con la misma alineación, esa que solo ha tenido cambios en el bajo para ser el segundo trabajo con la banda para Dave Beste. Los demás siguen lo mismo, Jay Buchanan en las voces y la harmónica, Scott Holiday en la guitarra y Mike Miley en la bateria.
Sigue siendo exponencial el sonido de la banda, ya que cada vez se va puliendo más su trabajo final. Algunos podrán quejarse de que ha perdido un poco ese sonido crudo con los que se pusieron en el mapa.
Al igual que esas bandas setenteras tenían afición a poner esa suavecita, esa balada, esa que sirve para poner todos «mas acá»… pues también se hace presente. «Pretty Face» tiene una cadencia especial, con ese riff más escaso, por lo que la sección rítmica es la encargada de llenar los silencios en su mayoría, perfecta para eso que sientes…. mientras le pongas más atención al ritmo que a la letra
Acto seguido, esa canción lenta, casi pesada, trágica, que habla de eso perdido, una donde se luce Jay, que es la que aprovecha para ampliar todo el rango vocal que tiene -que sí, antes de que alguien diga algo, no es Robert ni Freddie… pero nadie más lo es-. Cuando cantas con el feelin‘ se nota. Además, ese solo de guitarra, más que pintado para hacer air guitar con esa cara de angustia de los solos.
«Black Coffe» es una prueba interesante, para probar que el groove no está peleado con los guitarrazos. Es un cover de Humple Pie, escrito por Ike y Tina Tuner. Para hacer un buen cover hay dos fórmulas, la primera es tocarlo tal cual, como si lo copiaras. La segunda es hacerlo tan diferente que no se escuche como el de alguien más. Los Rival Sons usaron la segunda y les funcionó.
Para terminar las dos partes que le dan nombre al disco son bastantes recomendables, sobre todo la segunda, que se escucha un poco mas épica -que también si en esa terminan el disco, nadie les va a decir nada- pero lo mejor de este disco es «Thundering Voices», una que probablemente deba convertirse en emblema de la banda, una vez que pase el tiempo y se le da una revisada más. La canción que resume todo lo que la banda es capaz en su pico más alto.
Igual que sus contemporáneos en el género, no pasara de ser una banda de culto, porque es muy complicado que vayan a alcanzar el mainstream, total porque «suenan fuera de época» y su imagen -que su portadas con Martin Wittfooth está para enmarcar qui le echan un ojo a su trabajo-. Probablemente los van a abuchear el miércoles porque «no son metal», pero qué se le va a hacer. Si Black Sabbath, los escogió para su último tour, es por algo, porque rifan