Anoche tuvimos el honor de presenciar el Indie Fest, un evento que reunió a varios de los mejores talentos de la escena emergente y a su vez, un espacio para conocer propuestas nuevas y frescas que están ascendiendo con sus estilos peculiares en la música indie. Diversidad de sonidos que deben ser escuchados, pues están a la orden del día innovando, aquí la reseña…
Silent Lune inauguró la noche con notas de post punk y grunge, los chicos subieron al escenario decididos a impactar con sus rolas, como “Burning Fuel” y “Shades Of Red”, para dar comienzo al evento animaron al público que rápidamente comenzó a fluir.
Malamar es una banda que fusiona varios sonidos con el reggae, los chicos son muy animados tocando y cada instrumento se logra disfrutar. Las guitarras, el teclado y un pandero que si bien no es empleado en el género, le da un estilo que lo distingue totalmente. “A Un Lado” fue muy coreada y bailada, otro buen punto a su favor son sus letras y el goce que imprime el vocal a su interpretación.
Otra propuesta muy interesante y placentera a los oídos es Disco Malabu, originarios de Acapulco, Guerrero. Al momento de aparecer en el escenario incitaron al baile y los gritos. El foro se convirtió en una disco tropical que visitas cerca de una playa. Los chicos reflejan en sus canciones la frescura de su lugar de origen con una combinación de guitarreos, synths y un drum pad que da ritmo delicado a todos los tracks. “Universo” y “Ser”, su segundo sencillo, fue parte de su repertorio, continuando con una sorpresa: “Deseo”, la primicia que será su próximo single a lanzar.
El momento de Justa Veronna llegó y siguió poniendo a la audiencia a bailar y brincar. Si bien no es un rock al cien por ciento, también tiene toques de pop y letras con las que te identificas rápidamente. “Héroes” fue la más amada por el público y un instante de amor y gratitud fue cuando el vocal ondeó por el aire una bandera con el nombre de la banda, seguido de agradecer al público.
“Gracias por asistir, es un gusto crear música independiente, gracias por apoyar la escena y que siga sonando la música mexicana indie”, comentó.
Hasta este momento no habíamos parado de brincar, bailar y cantar y Burton continuó manteniéndonos con ganas de seguir disfrutando, el disco y rock de nuevo se hicieron presentes, las más coreadas fueron “Cosmo” y “Tchno”, pero concluyeron con “Sunset San Francisco” que nos hizo llegar al éxtasis.
Cambiamos de estilo y si queremos una buena propuesta actual influenciada por leyendas clásicas del rock de los 60s, el power trio Johnny Nasty Boots no nos defraudaría.
La banda de la CDMX llegó con sus intensas guitarras a mostrar el gran talento que tienen, saben lo que hacen y demostraron que tocar es como hacerle el amor a sus instrumentos. Esta noche en la batería no estuvo presente el integrante original, sin embargo, fue la sorpresa que ni Johnny se esperaba, ya que Mr. Chochi apareció para unirse y tocar por este día, deleitando al público con “I’m Cursed” y “Jump and Shout”, derroche de rock a la old school.
Pandilleros cerró la noche, el intenso rock con toques de ska, el sax, las guitarras, la batería y el contrabajo se conjuntaron para crear una atmósfera única, “Soy Pandillero”, “El Lado Bueno” y “Nena” hicieron bailar y cantar. Lalobilly brilló por su ausencia, sin embargo, no significó que hiciera algo falta, los chicos lograron transmitir el ánimo y entusiasmo y así cerraron el evento.
Si bien en la radio se sigue oyendo lo mismo, es porque así queremos y nos encargamos de posicionar a las bandas cuando las escuchamos o las vemos en Youtube, por esto, no damos oportunidad a las nuevas propuestas, ya que no nos podemos quejar, bandas talentosas hay muchísimas y esta noche quedó demostrado.
Fue un excelente cartel y tuvo de todo, desde rock, disco y reggae, el pero es que necesitamos escucharlas y darles ese impulso para que crezcan más.