Desde la primera respiración hasta el último aliento, las personas viven acompañadas por el llanto. Hombres, mujeres, niñas, niños, adolescentes, bebés, ancianos y ancianas lloran, lo hacen por amor, tristeza, alegría, nostalgia o dolor.
Sin importar el motivo las lágrimas siempre están ahí, al acecho para tomarles por sorpresa. Pero, nadie enseña a llorar, nadie dice cómo hacerlo o dónde hacerlo. De estas dudas, Francisca Valenzuela compuso su sexto disco Adentro.
Un álbum que llegó por sorpresa, con una ruptura amorosa y mucho dolor, algo parecido a las causas del llanto.
“Esas canciones las escribí por necesidad, no tenía mayor pretensión que sacar algo de adentro. Entonces algo que es tan personal, urgente, íntimo y crudo, y que habla un tema tan sensible como que cobra una vida propia y vive en su propio mundo. No responde a tendencias ni sonidos, sólo está”.
Para Francisca Valenzuela, escribir los 11 temas del disco fue una catarsis o como ir a terapia. Cada canción nació de un “vómito emocional” que arrojó frases sueltas y acordes dispersos que encontraron forma de composiciones durante “el insomnio del sufrimiento”.
A varios meses de ese proceso, la cantante originaria de Chile reconoce que ha sido complicado escucharlas de nuevo y compartir esas anécdotas con el público.
“A la hora de cantarlo, publicarlo y hablar de ello ha sido muy loco porque ha sido revisitarlo frontalmente, como reactualizando la historia. Es súper honesto, entonces dije, si saco este disco no puedo estar fingiendo o crear una pose. No, no. Se trata de mí”.
Durante este duelo, Francisca se percató que, pese a hacerlo desde niña, no “sabía llorar” porque nadie la preparó para ello.
La rabia y tristeza que padeció le provocaba llanto en el autobús, en la casa, en el estudio o con sus amigues sin que pudiera evitarlo. De estos momentos surgió, el tema “¿dónde se llora, cuando se llora?” el primer sencillo y que le valió una nominación al Latín Grammy por mejor canción.
Así como Julio Cortázar compartió sus Instrucciones para llorar, Francisca plantea si hay un espacio ideal para el desahogo de emociones.
“Es como mirar las mismas cosas, pero desde otro lugar. Yo me empiezo a preguntar cómo lo hacen todos cuando quieren llorar y es lo mismo que hace Cortázar con esta historia porque todos lloramos y él lo intenta extraer de todos para darnos sus instrucciones y parezca que es algo que podemos hacer. Entonces, es una linda referencia porque me gusta estar ligada con mi influencia literaria”.
¿Vulnerable o histérica?
En el día a día, las mujeres cuando desahogan sus emociones al punto del llanto son erróneamente señaladas de ser histéricas y de armar escándalos.
Para Francisca, el mostrarse vulnerable y manifestar lo que sintió en Adentro fue otra forma de toparse con los prejuicios con los que vivió al inicio de su trayectoria.
Ella tenía claro que quería un disco emocional y sincero. Pero, en su mente retumbaban aquellos comentarios de los hombres que alguna vez le causaron distintas inseguridades.
“Me costó mucho al principio porque sentía que también yo debía responderle a la gente afuera y no me sentía tan conectada con mi propio valor.
También al inicio de mi carrera era más difícil abordar estas temáticas porque había muchos comentarios de que eres histérica, quejona, mejor haz esto, se esto. Todo el tiempo se otra cosa y me costó mucho no hacerle caso a esos comentarios”.
Con este tipo de materiales, Francisca espera contribuir a que otras músicas puedan y hablen de sus emociones sin temor al qué dirán o pensarán. Sabe que no es sencillo, pero señala que discursos así les muestran a otras personas, en especial a los hombres, que también es válido llorar.
“Los sentimientos no están limitados por tu anatomía y que ganas de derribar esos estereotipos”.
Recrear una historia para sanar
Durante los 37 minutos y un segundo que dura el disco, Francisca Valenzuela recorre las fases de una ruptura como la tristeza, la rabia, el despecho y el perdón.
Estas etapas estarán representadas en su próximo concierto en la Ciudad de México, el 22 de noviembre, en el Auditorio BB, el cuál asegura que será el show con mayor duración que ha hecho donde interpretará todo el álbum Adentro y varios sencillos que han marcado su carrera.
Para esta presentación, Francisca prometió crear escenografías que muestren la historia que sufrió.
“Es un show único con escenografía especial, una puesta en escena especial con muchos invitadas e iluminación. Será un viaje con momentos muy prendidos, rockeros y bailables, pero otros muy sentidos e íntimos con la lagrima afuera. Te prometo que vas a llorar.
Las ganas de hacer este show tienen que ver con las ganas de reconectar todo lo que sufrí en pedacitos, pero en otro momento emocional”.
El salto de fe de Francisca Valenzuela
Francisca Valenzuela vive un momento completamente distinto al de hace unos meses. Dejó Chile para residir en la Ciudad de México con el propósito de dar un salto en su carrera musical.
Hoy quiere seguir los pasos de mujeres como Chavela Vargas, Mon Laferte, Julieta Venegas, Natalia Lafourcade, Cecilia Toussaint, entre otras, y llevar su música más allá de América Latina.
Tras más de una década de carrera, Francisca hoy se siente lista y plena para compartir con sus seguidores sus obras y regalarles un pedacito de esos temas para que los hagan suyos.
Además, espera que cada persona que escuche sus canciones pueda integrar esos temas en su día a día de tal manera que encuentren un apapacho porque en ese proceso de encontrar un espacio para desahogarse, le dio a su público un disco para llorar cuando quieran llorar.
-¿Adentro puede ser ese lugar dónde se llora, cuando se llora?
“Sí, qué poético, pero espero que sí. En un muy buen sentido. Ojalá sea como el meme que dice ‘repito la canción porque no me dolió lo suficiente’, que Adentro sea eso para ti.
Que mi voz y mi canción esté presente en sus vidas es una cosa que nos une porque nos conectamos a través de esa canción”.
