Foto: Facebook Oficial

Kendrick Lamar es como una especie de «Dios». Un Dios que ha ido encajando en la ideología de muchas personas, aquellas que tienen un placer escondido y que quizá, fuera de este mundo, tiendes a idealizar las cosas. Todo se aleja. Nada vuelve. Regresa.

Gracias a esas expectativas sosas, podemos estar alerta de aquello que nos interesa. La música es un portal que de la mano te lleva a encontrarte. Kendrick es un portal.

Lejos de todo ese enredo, este rapero concluyó su cuarto disco de estudio: DAMN, que presentó en un plano primario y que días antes de saberse el día de su estreno, destacó «HUMBLE», su primer sencillo del cual le dio un audiovisual que derramó poder durante su estreno.

Este estreno era por que ya se dejaba venir DAMN. y estábamos a pocos días de poder escucharlo completamente.

¡Escúchalo aquí!

Una vez que se escuchó en el mundo, estaba listo para dar un giro total en su vida y su actuación como headliner en Coachella de este año estaba por llegar. Y vaya que la audiencia sabía de lo bueno, pues su presentación se llenó de alma y voz única. Su presentación estuvo brutal. Este fin de semana es el segundo fin de semana y su presentación se comenta será diferente a la primera.

En los días de descanso que hay entre cada fin de semana en Coachella, las bandas suelen agradecer de alguna forma el recibimiento que tuvieron en el festival. Kendrick agradeció de manera sorpresiva con un nuevo video para una de las canciones que más hacen sonido de su más reciente disco. Vaya, este hombre no para y todo lo que hace es único.

Checa el video a continuación.

«DNA.» es una de las primeras canciones que se reproducen en el disco y que el visual vemos como el rapero es interrogado, con imágenes de una noche loca y ¿un ataúd?, vaya, sí que este hombre sorprende.

Kendrick Lamar gracias por todo lo que haces. Gracias por esas genialidades y ese aspecto disuelto de energía. Te mereces unas plegarias, Dios.