Flos Mons vuelve a pisar fuerte, ahora con su nuevo sencillo “Calma y Tempestad”, el cual continúa reivindicándolos como una de las bandas nacionales de origen independiente con mayor proyección a futuro.
El conjunto conformado por Roberto Mauricio, Esdras Garcés, Edgar Barquero y Pedro Castillo es un representante vivaz y atractivo en la escena del rock alternativo mexicano, el cual con su música se permite llegar al oído con aparente facilidad, pero el casi incoherente contraste con sus letras invita instintivamente a adentrarse en su construcción de mundos, la cual, a veces oscura, a veces densa, pero siempre atrayente.
Con “Calma y Tempestad”, la banda apunta directamente a su reacción a la inexorable situación que atascó, apretó, modificó, imposibilitó, reposicionó y desnudó a casi todos desde hace más de un año; el vacío, caer, la incertidumbre y el miedo construyen una letra que se intercala con una melodía cíclica encabezada por una impecable base rítmica y melodías salteadas.
Originarios del sur de la Ciudad de México y juntos desde 2015, Flos Mons – cuyo significado traducido directamente del latín es: flor de montaña- se ha erguido como un grupo voluble, pero identificable al mismo tiempo.
Si deseas tener una breve experiencia de un rock alternativo, fácil de digerir y con sutiles arreglos atmosféricos, su proyecto debut, “Nocturnos” es para ti. Su mayor virtud es atraparte con tan poco tiempo, dado que es un álbum de apenas 25 minutos, el cual aprovecha al máximo cada uno de éstos.
En fin, si te gusta sufrir sonriendo, me encantaría recomendarte a Flos Mons, porque la música de Roberto Mauricio y compañía duele y al mismo tiempo no; cura y duele y no: raspa.
Por: Daniel Cañón
