Parece que muchas de las nuevas propuestas en la escena del rock prefieren regresar en el tiempo y sonar más a un rock clásico, que dejarse llevar por los nuevos sonidos del género, esto es un riesgo que hay que tomar, pues si bien las grandes bandas hoy consideradas leyendas, han hecho lo propio en aquellas épocas doradas del rock dejando su sello en la historia musical.

El riesgo lo ha tomado Kadavar, que muchos quienes escucharon por primera vez a la banda aseguraron se trataba de una banda setentera u ochentera, tanto por su música como por su imagen, pero la realidad es diferente, pues cuentan con tan solo ocho años de carrera musical y en tan poco tiempo han dado mucho de qué hablar, pues quien pensaría que aquella época psicodélica del rock que iniciara a mediados de los 60, regresara en esta última década con barbas y directamente de Alemania.

Fundado en 2010, el trío alemán cuenta con cuatro álbumes de estudio, Kadavar (2012), Abra Kadavar (2013), Berlín (2015) y Rough Times, este último llegó a las tiendas en septiembre del año pasado bajo el sello de Nuclear Blast, lanzando este material en diferentes formatos como CD, vinyl (diferentes ediciones) y cassete, siguiendo la línea de sus trabajos anteriores, fusionando el hard rock, rock psicodélico y stoner rock; Kadavar nos regresa en el tiempo con sus excelentes ritmos.

El disco, como de costumbre, es muy digerible y trasmite una serie de emociones que te hacen desde solo mover un poco la cabeza con el ritmo, hasta de plano recordar bandas clásicas como Black Sabbath o Deep Purple, pues en algunos temas podremos encontrar cierto parecido de ritmos, podrías pensar que escuchas un fragmento de “Paranoid”.

El videoclip del primer sencillo del álbum, “Die Baby Die”, es un viaje alucinante, colores, cortes y un estilo setentero es lo que distingue este audiovisual al que el vocalista y guitarrista de la banda, Lopus, comentó al respecto:

Siempre quise hacer un video con estilo de una cinta de VHS vieja. Fue la canción «Milán» de la banda Rotor donde cogí la idea y el clip y lo grabamos en Leipzig. Como es apreciable, en el clip hay muchos colores, efectos, capas, cortes muy rápidos, mucho caos, que encaja perfecto con la canción.”

Sin duda un excelente material que ha encajado perfecto con la imagen e idea de la banda y que desde luego con esto, consiguen dar un paso importante en su carrera, pues cada vez se hace evidente su estilo para nuestros tiempos de “nuevas propuestas”, ellos han tomado el riesgo y lo están haciendo de gran manera y claro, todo esto sus fans lo podrán disfrutar y apreciar.