Después de anunciar su nuevo álbum a principios de abril, Yeasayer finalmente lanzó Erotic Rerurns bajo su propio sello, Park the Van, nuevo proyecto de la banda desde 2016, cuando sacaron Amen & Goodbye. Aunque es distinto a sus trabajos anteriores, no deja de experimentar con varios sonidos e instrumentos que cambian de intensidad en cada canción, lo cual hace que valga la pena escuchar todas con detenimiento.
Empezamos arriba con “People I Loved”, bastante animada, de esas que atraen desde un inicio con sus guitarras eléctricas que permanecen durante el resto de la canción, sin volverse cansado o repetitivo. De ahí, nos mantenemos arriba con “Ecstatic Baby”, uno de los singles de Erotic Rerurns, en el que la banda juega con las voces sobre un colchón de instrumentos bien estructurados, mezclados con sonidos más eléctricos. A diferencia de la primera canción, la guitarra no es el elemento principal, sin embargo, es la encargada de llevar el ritmo del baile que sin duda se produce naturalmente.
“Crack a Smile” es una de esas canciones que escucharía en la playa un día que esté disfrutando el estar viva. Su vibra surf , el bajo y la guitarra con ese lado experimental con el que la banda busca juntarlo todo con sintetizadores que, para mí, sonaron a lo que describiría como flautas indias en notas altas y golpes eléctricos.
De repente, el ritmo baja con “Blue Skies Dandelions” que, al contrario de su nombre, es una de las canciones más obscuras, por decirlo de alguna manera, del disco. Con bajos profundos y guitarras sorpresivas, la sensualidad se empieza a sentir desde el inicio.
Continuamos con otro single del disco, “Let Me Listen In On You”, el cual tiene una subida constante, que te va preparando para el punto clave de la canción poco a poco y cuando llega ahí te deja caer abruptamente. Pero si esperamos y escuchamos, nos damos cuenta que esa bajada fue la que impulsó la última parte. Durante toda la canción escuchamos violines y piano, para terminar escuchando el mar.
“I’ll Kiss You Tonight” es sin duda, algo que escucharías con buen humor, y aunque no recupera por completo la energía de la primera parte del disco, no desanima, sin embargo, no estoy tan segura de cómo se relaciona esta canción con el resto del álbum; sobresale tal vez por la simpleza.
Con “24- Hour Hateful Live!” la cosa cambia cuando lo primero que escuchamos es el siempre bello sonido de un saxofón delante del resto de los instrumentos. En realidad, al principio no sabes exactamente qué vas a escuchar, pero vale la pena. Por otro lado, con “Ohm Death” pasa lo contrario, desde el nombre puedes imaginarte qué vas a escuchar; el ritmo vuelve a bajar, pero para ser sincera, hasta sentí que bajé de dimensión.
Finalmente, el último single y canción de Erotic Rerurns es “Fluttering in the Floodlights”, que levanta y pone a bailar y jugar bajo las luces, lo cual concluye de manera satisfactoria el álbum.
Sin duda, la banda tomó más riesgos y libertades al hacer este nuevo proyecto y se nota en la variación de los sonidos; es un álbum que vale la pena escuchar con atención, porque parece que cada instrumento está exactamente donde debería de estar.