Así como el vino, Madonna con los años ha evolucionado en la forma en que se reta y reinterpreta a través de la música, y en esta ocasión no cabe duda que demuestra los años de experiencia y las formas de marketing para seguir a la vanguardia en la escena musical.

Madame X se puede descifrar cómo oro cortado a láser, sigue siendo la misma piedra preciosa llamada Madonna quien inició en 80 pero delineada por la nueva ola de música y las maneras de reproducirla.

Una pirata experimentando nuevos territorios, se dedica a robarse a sí misma, a reinventarse, y experimentar la pérdida de identidad con su canción «Extreme Occident» con toques tribales e indúes:

«Guess I’m lost
I had to pay the cost
The thing that hurt me most
Was that I wasn’t lost
I wasn’t lost»

O el simple hecho de hablar de las guerras en donde todos pierden gracias a los conflictos por riquezas y religión; en una ocasión la autora de «Line a Virgin» señaló que la religión divide y la fe y el amor nos une. Así relata un pasaje de su disco titulado «Good control».

«This is your wake-up call
I’m like your nightmare
I’m here to start your day
This is your wake-up call
We don’t have to fall
A new democracy
God and pornography
A new democracy»

Desenterrar de entre Latinoamérica sus nuevos ritmos tipo Reggaeton con el colombiano Maluma al interpretar «Medellín» cuyo video ha sido un éxito en YouTube más de 34 millones de visitas a la fecha.

No cabe duda que Madame X es una revolución para la propia artista como para la industria de la música, se encuentran similitudes entre su último lanzamiento discográfico y su disco American Life, el cual lanzó en el 2003.

Escuchar un disco así es tener presente las revoluciones sociales, espirituales y hasta propias. No cabe duda que vale la pena está nueva etapa de Madonna.