Fotos: Facebook Oficial de la Banda

Mi mamá me llegaba a decir en aquellas pláticas que no tenían un rumbo fijo: «Da las flores cuando tengas que darlas y da cariño cuando veas que te dan el doble de amor». Le agradezco tanto por esas palabras. La vida me dio lo mejor de ella.

Nunca creí que los sueños se lograrán y menos cuando dentro de la carrera que se llama vida, pudieras en verdad hacer lo que más te gusta. Esta vez pude entrevistar a Love of Lesbian, la banda que con su poesía hecha música, me ha transportado a la verdadera vida.

Sin lugar a dudas, la energía de todo se proyecta dentro de las manos que hacen posible todo, y cuando me refiero a todo es TODO. Cuando eso pasa, las marcas se ven notorias en las manos, con callos y monumentos rasposos. Las grietas hablan del camino del trabajo y las venas ese pulso que la sangre emana cada segundo de nuestras vidas.

Veinte años se dicen fácil pero, ¿qué debe pasar una persona para ver proyectados por fin sus logros? En este caso son cinco(que anteriormente eran seis) músicos que iniciaron un viaje de amigos y que poco a poco se fue diluyendo el alcohol en agua; la separación de esos dos elementos se hace a flote y es cuando la superación culmina en éxito.

«Hemos querido hacer un trayecto muy pausado. Como mencionas para nosotros está aún muy fresco el recuerdo del primer Caradura, nuestro primer concierto con 250 personas donde no se podía ni pasar. Es una de las noches más llenas que hemos tenido como músicos. Todo el paso nos lleva al concierto de los 20 años de una banda que tenía amor por México y estamos orgullosos de la pasión y es un lujo poder hacerlo en el Auditorio Nacional.» Menciona Oriol.

Reiterando la semejanza de vida que hay, poco a poco se ven los estragos de esa línea de vida. Podemos tener un alter ego o no, pero si le echas ganas, cada viaje que hagas te dará los frutos que siempre mereces. Love of Lesbian dan una merecida lección, con bofetadas y con caricias al mismo tiempo, llegan a ser ese marido golpeador pero que jura amarte. Así de doble cara, pero no tal cual; aquí me enfoco más a su ritmo incondicional y poderosos que solo ellos pueden tener en una tarima.

«Tenemos dos vidas: una en ingles y una en español. La primera fue una etapa muy divertida. Fue como tomando una tabla y fue como el cambio que surgió de un tercero de conectar más con nuestro público porque entendíamos que teníamos buenas críticas por parte de la prensa, pues somos unos cuenta cuentos, somos una banda que le gusta conectar con las letras es por ello que decidimos cambiar al español. Cada vez estamos más seguros y más determinados en lo que queremos hacer.» Me cuenta Oriol sin titubear.

Love of Lesbian exhibe el verdadero sentido de la empatía y aquello que es vulnerable, todo esto envuelto sin perder ese gran ingenio que Santi Balmes crea al momento de escribir aquellas piezas que marcan y se vuelven soundtracks de la vida. Al igualq eu su viaje de ensueño, ellos se describen como una banda soñadora y que cada que están en un concierto lograron un cometido para ello y para sus fans: tener una reunión intima de amigos que los acompañan en ese planeta que ya hicieron suyo.

«Nos cuesta mucho ser una banda. Nosotros siempre hemos sido una banda que no ha dejado de soñar, en que todo lo que podíamos pasar podría ser posible y nunca hemos dejado de soñar. Esto, es lo que surge en nuestro lugar de ensayo. Nosotros nos seguimos buscando con la música.» expresa Oriol.

¿Qué pasara dentro de la mente de ellos al momento de componer? A mi manera de escuchar, son una agrupación que enaltece  y a su vez aplasta al amor. Lograr conectar con una canción y verla por fin plasmada en un disco ¿tendrá lo idealizado? Cuando les pregunto esto nunca saben que responder, pero aquí tienen claro que hacen y porqué lo hacen.

«Nosotros somos una banda que lo primero que queremos hacer es emocionarnos nosotros, si eso no pasa, no lograremos entusiasmar al público. Si nos sentimos orgullosos lo verán ustedes en nuestros conciertos, porque son muy emocionales. Tenemos una montaña rusa de emociones, porque nos llena a nosotros y de paso a ustedes.» suspira Bonet al relatar esto.

Un destello de luz. Una bola de energía. Un suspiro. Pelar los dientes y voltear al cielo. Momentos de una vida que se narran tan fácil pero que ese instante, si lo miras detalladamente, logran darte más de aquello que solo logra ser efímero. El verdadero cometido se habrá cumplido cuando disfrutas sin temor ni miedo alguno los instantes.

Love of Lesbian han disfrutado cada centímetro de vida recorrido y 20 años de existencia hacen que la vida de estos lesbianos se vea sencilla y envuelta en un plan que no se planeó y que simplemente se improvisó. Orgullosos de lo que fueron en un principio y en lo que son ahora, Love of Lesbian, me dan más vida y más energía para cuando me encuentro derrotado. 20 años, amigos nuevos y amigos que se fueron, canciones y transiciones y muchos kilómetros recorridos.

 «Yo creo que sí, yo creo que si hacemos la lista para atrás, pues siempre hemos estado mantenidos, pues sigue vivo el espíritu familiar que nos unió en un principio, pues llevamos 20 años y sigue el núcleo que unió a la banda. Somos una familia y eso nos hace sentir orgullosos; hacemos con gusto lo que nos gusta y con quien nos gusta. Yo creo que eso es lo más importante. Los Love of Lesbian de hace 20 años estarían orgullosos de los LoL de hoy día y viceversa y eso es lo más importante.» me dice Oriol para despedirse.

Poder entrevistar a la banda -o parte de ella-, que más te gusta es un logro. Nadie sabe por qué amas tanto algo o a alguien, pero eso no importa, lo necesario aquí es estremecerte con lo que a ti más te deja, ya sea marcado en piel o en el corazón.

La vida que llevo es corta, pero me ha dado lo más importante: una banda que expresa por mí lo que no puedo razonar y lo que no puedo decir tan abiertamente. La vida es eso, un instante de justicia poética. 😉