Tres años de espera fueron necesarios para que el trío británico Years & Years volviera a la escena musical con su segundo álbum de estudio Palo Santo. Cuyo título hace referencia a varios significados dependiendo el punto en el que se mire. Por ejemplo, literalmente hablando se le dice “palo santo” a un objeto sudamericano que era usado para defenderse de los malos espíritus. Pero viéndolo en un sentido más inclinado a la sátira, es bien sabido que éste nombre es usado por Olly Alexander (líder) como una broma a sus relaciones pasadas.

Cualquiera que sea el caso, el seudónimo conecta perfectamente con el contenido del álbum, pues su principal objetivo es tocar temas relacionados con el lado oscuro de la sexualidad, los tabúes, el deseo y la religión.

En cuanto al sonido, varios críticos y expertos en la música catalogan a Palo Santo como electropop con un toque de R&B noventero. Su pista inicial es “Sacrify”, además de ser una gran forma para arrancar con el disco, tiene connotaciones religiosas y pecaminosas con un ritmo bastante peculiar y difícil de olvidar.

Pero si hablamos de sonidos inolvidables, obviamente no podemos dejar pasar la joya que es “Hallelujah”. Tiene ese algo que inconscientemente te obliga a mover alguna parte del cuerpo al compás de la canción mientras coreas:

“Somebody like you. Somebody like you that I could dance to this to. Somebody like you. Somebody like you that I could dance to this to, that knows what to do, somebody like you that I could move to this to. Until our bodies are singing Hallelujah”

Hay que admitir que Palo Santo comienza con canciones muy prometedoras, temas que te atrapan apenas las vas escuchando, como es el caso de “All For You”, cuya letra tiene un trasfondo que debes interpretar bajo tus propios méritos, la melodía te va a encantar, sin duda, pero, ¿te llegarás a identificar con la lírica?

“Enemies are tryna catch up. But nothing’s gonna fuck with my love. Tired of erasing my history, history. Daddy said I never could win. That’s probably why I never pretend. But good things are coming to me.”

Es parte del estribillo de la cuarta canción del álbum denominada “Karma”. Poniéndonos un poco en contexto, Alexander ha dicho recientemente que este es el mejor momento para ser un artista gay, quiere dar un mensaje incluyente en sus canciones y desea rendir homenaje a los artistas que como él, pertenecen a la comunidad LGBTTIQ.

Llegando a la mitad del disco nos topamos con “If You’re Over Me», una melodía alegre y constantemente camufla ligeramente los reclamos que se expresan por parte de Olly, porque sí, es una canción de rompimiento y ambigüedad, pero no por eso se va a romper la armonía sonora que distingue a esta producción.

“Palo Santo” en camina la etapa final del homónimo, y consigo un cambio casi radical en cuanto al sonido. Parece ser que es la canción más importante debido a la profundidad de las palabras, pero quien sabe, todo depende de la forma en que lo mires. Tomando en cuenta la opinión del grupo respecto a esta pista, mencionaron que representa grabar algo que limpiaría la negatividad, así es como ven la música y la composición de sus canciones.

En conclusión, esos tres años de espera valieron 100% la pena. Todo apunta el trío busca enfocar su trabajo hacia cosas más puras, transparentes y por qué no, sexuales.