En esta era parece complicado que el lanzamiento de un disco sea algo que nos sorprenda, más si es de metal, más si es industrial y más si es alemán. Pero el legado que ha construido Rammstein no puede pasar desapercibido. Tal vez no lo va a poder arrebatar el título a los Scorpions de la banda alemana más importante, porque no son tan accesibles.
Pero tal vez más importante, no dejan a nadie indiferente, tal vez más al principio porque era esa época extraña donde también eran junto con Marilyn Manson el enemigo público número 1 por lo que había pasado en Columbine, donde uno de los perpetradores tenía una playera de ellos.
Ese arte de Sehnsucht era complicado de digerir para los padres, donde ese realismo le daba otro toque, no era como una portada de Cannibal Corpse. Más esa preocupación de no saber qué es lo que decían; el tener versiones en esto no ayudaba para esto. Pero la generación que creció con ellos -que somos bastantes- no se quedó por eso.
Ahora en 2019, después de su periodo más largo entre discos, 10 largos años, sale el álbum sin título o Rammstein; depende a quien le pregunten en internet. Con un cambio trascendental, Jacob Hellner deja de ser el productor, que había estado con ellos desde el primer disco. Olsen Ilvotini tomó el cargo -guitarrista de la banda de Richard Kruzpe.
Un cambio así por lo general solo puede tener dos resultados: una total reinversión o un abandono de todo lo que solía ser una banda -no hace falta aclarar que esta última tiene resultados bastantes funestos-. De estar en Emigrate a productor de Rammstein es una tarea muy complicada… de la que sale avante.
Junto con todo lo demás, una banda muy estable, algo raro que una banda de metal y de su género no haya tenido cambios de miembros en tanto tiempo. Donde todos se reparten la tarea de escribir – no solo Till tiene en su bio de Wikipedia “poeta” en ocupaciones-. De igual manera Lindenmann siempre ha tenido crédito en la música también.
El resultado es un disco más grandilocuente, que suena más grande que la banda. Es un disco que se le queda corto a los ear pods, necesitas verdadera calidad para poder para poder apreciarlo. Todo el poder y todo lo oscuro no están peleados con la finesa y las texturas.
Como “Puppe” una canción que habla de cómo su hermana -metafóricamente hablando, esta canción está inspirada en un poema de Till- es asesinada brutalmente en el distrito rojo, una canción que sin problemas podría estar en el soundtrack de Lars von Trier, nos muestra uno de los trabajo más poderosos de Lindenmann.
Todo ese barítono desgarrador, marcando lo más posible su fuerte acento alemán ahí, el solo crea una atmósfera para la letra. Se escucha la desolación de la muñeca, en un track pesado y denso. Algo verdaderamente a la altura de lo mejor de la banda, algo bastante significativo con su catálogo.
En «Diamant» nos presentan todo su rango, cuando una melodía más sutil, guiada por la guitarra acústica. Kurzpe y Landers trabajan no solo en perfecta sincronía, sino también en perfecta armonía. Además de seguir demostrando esa versatilidad a lo largo de los años.
Los sencillos que guían la salida del disco se entiende todo. «Deutschland» es una oda a Germania, a esa representación de todo el pueblo germano y su historia. Es como la Mannschaft, el apodo de la selección alemana, que se traduce al equipo nacional.
Un apodo que carece de gracia, pero revela todo lo que hay que saber del equipo alemán. Lo mismo pasa cuando lee la letra en un idioma que si habla, es el mismo sentimiento. También es la canción que mas problemas les va a traer en los medios con ese video. Un día normal para la banda realmente.
«Radio» es la prueba del dominio de lo que la banda sabe mejor hacer. Ese riff pesado de las guitarras, con ese riff electrónico del teclado. Es la canción que va a hacer que muevas la cabeza mientras tratas de balbucear alemán. Ese ritmo militar ese contagioso.
Un disco que llegó a estar tan alto en el 9 de los Billboard 200 en una época donde otra vez el metal y mas el industrial y mas los alemanes han regresado al ostracismo, no hace mas que hablar de la calidad con la que se hizo el trabajo.
Tal vez ya perdieron el otrora impacto que llegaron a tener, de igual manera 25 años de mantener eso, pero la calidad y habilidad musical siguen intactas. Además de prepara la siguiente gira mundial para promocionarlo. Otro rubro donde nunca han quedado mal.
