Stian Sævig no es solo el bajista de Kakkmaddafakka, la banda noruega más famosa de la actualidad. Esa es sólo una de sus múltiples facetas. Stian es un músico camaleónico. Uno al que le gusta adoptar personalidades diversas como Sting, Chi, Environment, o su más reciente, Sti Cobra. Es con esta última faceta con la cual acaba de publicar su primer material llamado My Names, producido, creado y escrito por él mismo.
En entrevista para Revista Kuadro, Stian Sævig, nos cuenta sobre su proyecto solista y de cómo surgió la idea:
“Si alguien me pregunta cómo surgió, solo le puedo decir que surgió y ya. No lo he pensado mucho, y fue muy divertido. Todo empezó en los ensayos con Kakkmaddafakka, donde siempre cantaba un poco. Luego iba a la computadora a programar sonidos sin tocar ningún instrumento.” Para Stian, o Sti Cobra, todo consiste en una especie de juego, uno que se basó en adoptar una nueva identidad: la de la estrella del dance pop.
“Mamba Negra” es el sencillo promocional de My Names, que forma, junto a la «cobra», parte de la misma serpiente divertida, extravagante, que no se toma demasiado en serio. Stian confiesa que para componer «Mamba Negra», no sabía mas de cien palabras en español, y por eso, es una canción hecha principalmente para las personas que no saben nada de nuestro idioma.
“Ha sido una gran sorpresa que haya sido bien recibida por los que si hablan español”. ¿Y cómo no va a ser bien recibida? La canción tiene esa simplicidad y gracia típica de la fiesta mexicana libre de prejuicios. Sólo miremos la letra “…oh, naturales, oh diversión, ven a la fiesta, donde está mi cerveza, donde está mi corona…”
Stian aclara que cantar en otro idioma no fue algo nuevo. De hecho, la fama de Kakkmaddafakka se debe en buena medida a la decisión de preferir el inglés en vez del noruego. “Decidimos componer en inglés porque queríamos hacernos internacionales. No queríamos quedarnos en Noruega porque puede ser a veces muy aburrido.” Hoy por hoy, cabe decir, Kakkmaddafakka, es una de las bandas más importantes de indie rock europeo, al grado que en México tendrán cinco presentaciones en diferentes fechas, ciudades y foros. Por eso, Stian define a la agrupación como un «animal que crece y crece».
Eso sí, Stian Sævig está consciente de que no son los únicos noruegos que la rompen. “La música que se está haciendo en Noruega es bastante impresionante en estos días. Ahí está Kygo, Alan Walker, Aurora Aksnes. Hay muchas cosas que pasan, sobre todo en Bergen. Estoy muy orgulloso de lo que está pasando en mi país”. El que mas destaca es Kygo, de quien afirma “que es como un dios en Bergen por lo bien que le ha ido”. También menciona a AK2, un dúo electrónico de la escena under noruega y a Erlend Øye (de Kings of Convenience) que es una de sus mayores influencias.
Por último, Stian Sævig no deja de mencionar a The Whitest Boy Alive, banda alemana que es una de sus máximas influencias que, curiosamente, tiene un vocalista noruego. Y así, después de una conversación de serpientes, Noruega y Kakkmaddafakka, nos despedimos, sin saber cual será la próxima identidad que adoptara la siguiente vez que hablemos.