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Por Monserrath Pérez Huerta
Para entrar a un ecosistema de guitarras distorsionadas e interpretaciones caracterizadas por susurros y gritos desgarradores, necesitas escuchar al grupo estadounidense, The Used, ellos te acompañan con letras melancólicas que describen la existencia del ser humano, el sentido de la vida y la muerte.
El pasado viernes 6 de diciembre llegó un nuevo sencillo de la agrupación y Revista Kuadro te comparte la información. “Blow Me” es una canción que te explotará tus sentidos durante 200 segundos y te llevará a un universo bizarro.
El videoclip de la rola es una composición de máscaras presentadas con imágenes, que se enciman una tras otra con colores agresivos y fuertes, donde se muestran ojos, personas, venas y otros elementos que te erizan la piel.
La letra describe situaciones complejas de depresión y tristeza donde las armas son la salida; sin embargo, como todo producto comunicativo se presta a diferentes interpretaciones.
Bert McCracken, vocalista del grupo, explicó su percepción de «Blow Me»:
“Ya sea que metafóricamente represente el poder de las palabras en general o magnifique la preocupación de la situación de la violencia de armas, invitamos a los fans de nuestra música a encontrar un significado individual y personal en todas nuestras canciones».
Cabe destacar que la melodía se construyó con la colaboración del vocalista Jason Aalon Butle, líder del grupo de rock Fever 333. El próximo año la banda regresará con una producción de la mano del productor Jonh Feldmann, que ya había trabajado con el conjunto en Maybe Memories (2003) , In Love And Death (2004) y Lies for The Liars (2007).
Bert McCracken (voz), Jeph Howard (bajo),Dan Whitesides (batería) y Joey Bradford (guitarra) llegaron con su disco homónimo en el año 2002 para definir el hardcore de aquella época.
En el presente año, el conjunto cuenta con siete producciones donde sus más de 17 años se ven reflejados en materiales como: Vulnerable (2012), disco que se distingue por sonidos experimentales, Imaginary Enemy (2014), producción donde la banda revoluciona con ritmos más pegajosos y The Canyon (2017), álbum que cuenta con 17 canciones convirtiéndolo en su obra más larga.
