Después de unos meses sin tocar y con todo el sabor que los caracteriza, Tropikal Forever llegó a el escenario del Pasagüero , dándonos su ritmo «chabocho». Ya estaban listos los chabelanes y las maclovias todos envueltos de una atmósfera completamente kitsch.
Con un sonido entre cumbia, norteño, pop, merengue y un sutil toque de una guitarra metalera, Tropikal fForever reinventa éxitos Guns N’Roses, Queen, Nirvana, Metallica, Roxett, Van Halen, KISS, Europe, Vengaboys, entre otros épicos más. Con letras divertidas y «chabochas» como lo mencionan ellos.
Antes que llegara la media noche, arrancaron con su set con temas como «Fiesta de coocktail», «Cambiar de look», «No hay luz «. Llegó el momento sexy de la noche con la llegada de «maclovia». Una curvilínea mujer a la cual más de uno le declaraban su amor, pero no llegaba sola, llegaba con el típico sujeto «rostro» . Sí, así es, ese todas mías de la banda. «El rompe corazones de Tlatelolco«, el famoso y único Niño Rata. Llegando y armando armando «pachangon» con un streptess bizarro.
La noche se tornaba para una gran fiesta larga hasta que por el micrófono comentaron que había operativo y tenían que recortar su set, pero eso no desanimó a la gente y terminaron bailando con temas como «666», «Su chambelan» y «Aguas wey» .
Tropikal Forever en resumen es la fiesta, simplemente la fiesta chabocha...