Luego de lanzar sus álbums Trst y Joyland, el canadiense TR/ST nos trae su nuevo disco después de cinco años: The Destroyer.

La producción discográfica de Robert Alfons cuenta con ocho tracks de dark wave, el sonido que lo ha caracterizado a través de su carrera y el que lo ha hecho figurar entre varios músicos de este mismo género, logrando un sonido que a muchos agrada y que le ha permitido mantenerse vigente.

“Colosal” es la primera rola y es todo un majestuoso intro con una voz tímida, comienza con algo tranquilo y pocos beats, dando la bienvenida a un ambiente sombrío pero a la vez acogedor por los delays con tintes ochenteros para dar paso a algo más rítmico como “Gone” la cual incita a bailar en la oscuridad.

En “Unbleached” colabora con Maya Postepski de Austra quien ya había participado con Robert en el disco Trst del 2012, en este hit es mucho más notorio el electro goth, maneja secuencias de ritmos peculiares del género estilo bar under con el que no pararás de brincar y bailar en medio una multitud de cuerpos transpirando dentro de un ballroom que se alumbra con luces neón.

Con “Bicep” podemos escuchar una fusión de efectos, voces, beats con los que nos encantaría seguir bailando con tintes más sensuales y el hermoso detalle de simular el fin de la pieza pero inesperadamente regresar de golpe con una sensación de clímax en “Grouch Rvsd Mix” la rola anterior quedó superada, esta es más rica y te hace gozar, el dark wave y un poco de industrial seduce e incita a la perversión, hay más extroversión de Robert lo que demuestra que tiene las ganas para seguir rompiendo límites, su música no tiene fronteras sino la ambición de seguir ascendiendo con ayuda de bases del post punk.

“Poorly Coward”, “Control Me” y “Wake With Rvsd Mix” son canciones muy delicadas y tranquilas, con delicados crescendos y valles, un buen momento de bajar ese éxtasis y descender un poco pero con el mismo goce y volver a subir de manera súbita y llegar a un lapso de sobriedad, un tiempo de serenidad y un poco de oscuridad que prepara un diurno desenlace.

El dark wave con leves toques de industrial hicieron de este un regreso magistral de TR/ST, si bien no maneja el mismo sonido potente de los discos anteriores, el estilo no cambia, mantiene la esencia, lo que seguramente lo llevará a seguir como uno de los favoritos del género, esta es la primera parte de dos, la segunda saldrá en noviembre lo que también provocará una ansiosa espera.