Pond es una banda de Australia, de Perth, para ser más específicos. Esto, para los que estamos familiarizados con la escena del país de los canguros ya nos dice mucho de lo que se trata, pero para quienes no acá les explicamos.

Es la misma ciudad de donde son Tame Impala e incluso algunos músicos, tocan en ambas bandas, cosa que ha hecho que siempre sean muy comparados, pero Pond en este disco da un giro hacia terrenos nuevos que lo separan definitivamente de esa banda del venado domesticado.

Tasmania es el octavo álbum de la banda australiana y nos presenta 10 temas que exploran sonidos diversos, una ensalada de sabores heterogéneos, pero que al final de cuentas crean una mezcla bastante interesante y que, sobretodo, no saltan al oído, pues las texturas de todas las piezas gravita siempre dentro de una producción muy característica, sintetizadores bien estructurados, guitarras acertadas y una base rítmica segura de cómo construir un ritmo.

Canciones que acarician un synth pop como “Daisy” nos reciben en un universo en donde te das cuenta bastante bien de donde te encuentras parado. Sonidos tibios te guían por un paseo en donde los instrumentos saltan a tus oídos con asertividad y sorpresa. Hay momentos que juegan más y te retan, te traen hacia un estado mucho más relajado y con los sentidos mucho más expuestos, “Tasmania” y “The Boys Are Killing Me” nos sitúan en un instante más “sensual”, no necesariamente romántico, pero sí más sensorial.

Los sintetizadores son una parte fundamental del sonidos de este disco, y no podemos dejar de recalcarlo, pues los sonidos presentados en este disco tienen una excelente manufactura; “Hand Mouth Dancer” es un ejemplo de ello, sobretodo ya para el final de la pieza.

Como buena banda con una trayectoria psicodélica, podremos encontrar momentos mucho más llenos de viajes astrales, proyecciones corporales y disociaciones de la realidad. “Burnt out Star” y “Shame” hacen honor a ese pasado que respalda este trabajo y que nos deja ver toda la experiencia que los australianos tienen en estos terrenos.

Tasmania es un álbum completo, de esos que deben ser escuchados como un todo, pues cada parte se complementa, se balancea y se integra en un todo que significa algo claro; que entrega ideas, sensaciones e imágenes nítidas en un desierto virgen que es nuestra mente.