En esta ocasión fue un placer platicar con el cantautor y multinstrumentista mexicano Vera Pedro, quien acaba de lanzar su más reciente sencillo “Háblame de Ti” acompañado de un video dirigido por Carlos Lozada que cuenta con la actuación del video y producción del sencillo de Adán Jodorowsky. Durante esta entrevista en verdad apliqué el “háblame de ti” para tocar temas de autenticidad, especialización y cómo estar donde nos gusta estar.

“Háblame de Ti” nació hace siete meses como una composición natural y espontánea alrededor de una sola idea. Vera Pedro grabó varios demos que un amigo le compartió a Adán Jodorowsky a quien le encantó el trabajo que Vera estaba realizando y así se pusieron en contacto estos dos artistas. Fue un trabajo en conjunto: el demo era bastante sencillo, grabado solamente en piano y con un ritmo parecido al tango que después fue transformándose a través de la magia que los ambos lograron hacer juntos, entendiéndose y apoyándose.

“Esta canción también ha sido un parteaguas y gracias a ella ha llegado nuevo público, es muy íntima, relacionada a mi persona y a mis gustos que al final le da mucha autenticidad y eso siempre es algo positivo.”

La autenticidad siempre se agradece, especialmente en esta época en la que estamos tan abrumados por la cantidad de música que tenemos a nuestro alcance, que muchas veces nos suena todo igual. Así que cuando encontramos una canción genuina y real para el artista, es muy probable que como público la hagamos nuestra, como si hablara de nosotros o hacia nosotros. La música siempre tiene un grado muy alto de subjetividad y eso le da espacio a las personas a adaptarla a su contexto y a su propia vida.

Algo similar sucede cuando se hacen colaboraciones. Al trabajar con más personas dentro de una canción particular, es indispensable que cada uno de los involucrados se apropie de ella, Vera Pedro nos dice: “es como tener una visión alineada al proyecto, tiene que haber una similitud en influencias, gustos, visiones de la música; eso definitivamente te asegura que los miembros involucrados estén satisfechos y orgullosos con la obra.”

En este momento de la entrevista nos pusimos a platicar sobre algunas colaboraciones entre otros artistas –sin mencionar nombres ni géneros- que han hablado de que tal vez ni conocían en persona al individuo con el que estaban haciendo una canción y peor aún, no le caía bien, pero era un artista “importante” así que hacían la canción en conjunto, se volvía un éxito y luego cada quien por su lado. La necesidad de ser relevantes hace que pierdan autonomía y cariño por la música.

“Tal vez a eso ha llegado la industria explosiva y un poco abrasiva con los artistas porque gran parte de la música es compartir esa parte humana y sensible que yo creo no se puede lograr con estas colaboraciones, hacen que pierda el sentido.”

Pero hasta aquí dejamos esa plática, no queríamos ponernos malvibrosos o entristecernos por este hecho, así que nos enfocamos en una parte fundamental de su carrera como músico: el ser multinstrumentista. La especialización en cualquiera ámbito es una cuestión bastante cautivadora; en la música lo vemos cuando un artista domina un instrumento al punto de volverse un referente, pero el ser diestro en varios es un don que no muchos poseen. Vera Pedro sabe que su base es el piano, pero le gusta experimentar varias cosas para saber cómo funcionan y cómo se desarrolla él en distintas áreas, pero también es bueno tener un punto de especialización en ese rango de opciones. “No quieres caer en el dicho de “el que mucho abarca poco aprieta” y no sobresalir en nada. Es bueno experimentar diferentes cosas, abrirte a poder entender conceptos, áreas dentro de la música, instrumentos, historia de la música, sonido, producción o la parte técnica, pero es bueno poderte diferenciar”, comenta.

Vera Pedro en realidad estudió ingeniería química, algo que tal vez no tiene mucho que ver con lo que es ahora, y su paso de una carrera a otra fue gradual. Siempre ha sabido que la música aporta algo que nada más ha logrado hacer y es un sentido de autosatisfacción que poco a poco se fue dando.

“Siempre he estado en distintos proyectos y he tenido a la música cerca, entonces eso me permitió meterme más y dejar de lado otras cosas que no necesariamente signifiquen que no me gustan, sino que no me llevan a ese punto de autorealización tan auténtico”.

Puede ser un cambio difícil alejarte de la seguridad de un trabajo que todos te dicen que es ideal o que te va a llevar lejos, por dedicarte a algo que muchos consideran sólo un hobby o que cuando les dices a tus papás que vas a estudiar eso lo primero que te dicen es “¿y de qué vas a vivir?» Pero Vera Pedro ve como algo propio de nuestra generación el constantemente buscar hacer lo que queremos, lo que nos motiva y nos hace sentir o hacer cosas trascendentes. Puede ser difícil, pero “es casi imposible para nosotros estar en donde no nos gusta estar”, dice acertadamente.

A Vera Pedro sin duda le gusta el lugar donde está ahora y lo que está haciendo con su tiempo, pero también encuentra la belleza de hacer música en el poder de trascender y eliminar barreras de todo tipo que lo acaba convirtiendo en una especie de lenguaje universal. Para ilustrar esta idea, nos contó una pequeña anécdota.

“Tuve la oportunidad de ir a Japón, y estando en Tokyo, en un parque, había un viejito con su guitarra y a mí me prestaron una. No teníamos ninguna similitud cultural, ni idioma, ni de raza, ni de creencias o lo que quieras, pero justo nos entendíamos y tocábamos y sonaba como si estuviéramos comunicándonos a la perfección. Fue algo muy increíble que se me quedó grabado y eso para mí es lo más mágico de la música.”

Sin duda el arte es un lenguaje que puedes hablar en cualquier parte del mundo y te acerca a aquellas personas que pensabas, jamás podrían entenderte, algo casi sobrenatural.

Por ahora, nosotros seguimos escuchando lo nuevo de Vera Pedro sabiendo que este año fue muy positivo para su carrera; él mismo nos dice que si no fuera por este tiempo de aislamiento en que pudo impulsar su parte creativa, componer, grabar y ensayar, probablemente hubiéramos sabido menos de él. Eso sí, reconoce desde un punto de vista empático, que mucha gente ha sufrido bastante y que eso no lo debemos normalizar. Con este mensaje cerramos la entrevista, una despedida amigable, nos deseamos la mejor de las suertes y el mayor de los éxitos y seguimos atentos a cualquier actividad musical que nos regale Vera Pedro.