Dylan Cartlidge es un músico multi instrumentista, probador de ramen, organizador de netflix partys y freestyler inglés que comienza a hacerse su camino por los andares de la música y las redes sociales desde 2017. Al siguiente año (2018) fue firmado por Glassnote Music y de ahí no ha parado el trabajo.
El británico ha estado entregando música con un toque muy particular, muy cargado de la cultura que se ha apropiado el Reino Unido desde hace más de cinco décadas; R&B, Reggae, Hip-hop, etc, y nos lo devuelve en una amalgama llena de matices electrónicos y toques “modernos”.
El pasado 17 de abril lanzó su más reciente sencillo llamado “Yellow Brick Road” y como a Dorothy de El Mago de Oz, el camino de baldosas amarillas lo ha llevado a alcanzar más de 150, 000 reproducciones en la plataforma de streaming verde. Pudimos platicar un poco con el hombre del afro acerca de esto y demás chismes.
- Revista Kuadro: En 2017 sale tu primer lanzamiento llamado “Love Spoons / Strawberry Blonde’s Snip” y al siguiente año ya estás firmando con una disquera, ¿cómo cambiaron las cosas con este evento?
Dylan Cartlidge: Las cosas cambiaron en términos de alcance y además, pude colaborar con personas muy talentosas. Esto se siente muy bien porque se han convertido en una familia con la que puedo rebotar ideas. Es una responsabilidad que mantiene enfocadas tus ideas en un punto fijo.
Esto tiene muchas variables, pues puede ser algo muy bueno; tenemos el ejemplo de lo que está pasando en Corea del Sur y todo el K-pop que está básicamente manejado por disqueras o la popularidad de la música latina a nivel mundial, creo que todo depende de lo que tú esperes de esa relación, pues al final del día es un negocio y en algún punto debes salir de tu habitación o tu lugar de ensayo. Toma tiempo pero es algo que va estableciendo sus reglas hasta que te sientes cómodo.
- RK: ¿Crees que este es un momento clave para que los artistas tomen las riendas del negocio y cambien el mundo?
DC: Lo creo al cien por ciento, me parece que las personas ahora tienen mucho poder para hacer lo que quieran. El Internet es una herramienta muy poderosa y no sé si haya alguien que la controle, pero creo que las personas deben usar ese poder para elegir, para decir lo que piensan en línea y llegar a las audiencias que ellos quieran para hacer cambios. Creo que vivimos en una era “punk del Internet” y me encanta.
- RK: ¿Qué opinas sobre los servicios de streaming y la nueva forma de distribuir música de manera global?
DC: Es difícil responder eso, porque como escucha creo que es lo mejor que pudo haber pasado, pues tienes tanta música como puedas realmente escuchar por una suscripción mensual muy barata, pero como artista son sensaciones encontradas pues es muy difícil destacar, compites con Aerosmith, ¿me entiendes? Y el hecho de construir audiencias y conseguir reproducciones es muy diferente comparado a lo que sucede en las estaciones de radio.
Me parece que es una excelente manera de que muchas personas puedan acceder a mi música y al mismo tiempo puedo borrar las barreras en términos de géneros y estilos, y eso hace que sea muy extraño entender qué es lo que te sugiere el algoritmo. Al final de todo siempre se te está categorizando dentro de alguna etiqueta en la puede ser que no quieres que se te ponga.
Dylan nos habló también de las posibilidades que esta cuarentena le han traído en términos creativos, pues le permite enfocarse en trabajar en música de la forma en la que lo hacía al principio de su carrera, en su habitación. Y al mismo tiempo nos urge a mantenernos sanos en casa.
Si no has podido tener contacto con su música, este podría ser el momento indicado para hacerlo y aprovechar las horas de confinamiento.
