Wiz Khalifa nos presenta su sexto álbum de estudio llamado Rolling Papers 2 que, como su nombre lo indica, es la secuela de su disco Rolling Papers del 2011. Esta producción fue lanzada el pasado 13 de julio de este año y cuenta con 25 temas con diversas colaboraciones que van desde THEMXXNLIGHT hasta Snoop Dogg.
Una producción acorde a los tiempos modernos, beats que nos llevan al futuro que estamos alcanzando, trucos que ya se han vuelto un estándar y viejos sampleos que aseguran la inserción a nuestros cerebros es lo que encontramos en la segunda parte de estos papeles enrollados del buen rapero estadounidense.
Esta producción de hip hop nos recuerda que si algo no está roto no lo arregles, pues el disco está repleto de “viejas confiables”, es una compilación de canciones que repiten esquemas, refuerzan estereotipos, arriesgan poco y buscan ganar mucho. Pero al parecer, a fechas recientes hemos visto que el esquema sigue dando frutos y sigue cosechando adeptos jóvenes que encuentran en estas rimas y en estos ritmos, el espacio adecuado para fiestear y para pasarla bien.
Si hay música que se presta para ser el soundtrack de la vida, sobretodo si te dedicas a hacer cosas no tan legales, nos atreveríamos a decir que este disco está diseñado para eso, como el género en general, pero esta producción es una muy buena muestra de lo que ha estado sucediendo durante, por lo menos, en la última década en el mundo del Hip Hop.
«Something New», «420 Freestyle», «Real Rich», «Hopeless Romantic» y «Gin & Drugs» han sido los sencillos que se han desprendido de este esfuerzo y han tenido excelente recepción entre los entusiastas del género. La producción cuenta con una colaboración muy especial del rapero Jimmy Wopo para el tema «Blue Hunnids» quien a un mes del lanzamiento de Rolling Papers 2 falleciera, pero su voz quedó plasmada en esta canción que funciona como un homenaje póstumo.
No podríamos decir que éste álbum arriesgue mucho, ni que lleve el género a nuevos horizontes; tampoco podríamos decir que sea un parte aguas de la música moderna, ni que vaya ser un álbum que supere la prueba del añejo, pero definitivamente es un buen fondo musical para conducir en la ciudad a altas velocidades o para aquel DJ juvenil que necesite algo moderno para actualizar su playlist.