En la actualidad nos encontramos sumergidos en un sin fin de géneros y ritmos, y han sido varios los músicos que han decidido experimentar, tal es el caso de Carlos Icaza, mejor conocido como Tropicaza. En Revista Kuadro platicamos con él y nos contó un poco más sobre su proyecto.
Tropicaza no se limita a un sólo género musical, al contrario, está interesado por explorar muchos más estilos musicales.
“Para mí la música no tiene que ver con los géneros sino con la calidad de la música. Me llama la atención como muchos de los jóvenes les interesa mucho saber el género, y pues no hay género, justo la música que me interesa es la que no lo tiene, la que no puedes etiquetar”.
Tropic Aza comenzó sus estudios musicales desde muy joven y ahora domina varios instrumentos, lo que le ha ayudado a mostrar que la música está en todos lados. Es un músico autodidacta interesado en el bajo, guitarra, batería, percusiones, bongos y todo lo que le pongas enfrente, ni le interesa dominar alguno ni ser virtuoso en uno solo, al contrario:
“Me interesa que la música esté en todos nosotros, todos seríamo músicos si quisiéramos, todos somos capaces de hacer arte si quisiéramos, para mí no hay una separación entre el arte y la vida”.
En sí, Tropic Aza tiene diversas grabaciones, colaboraciones con estaciones de radio, revistas y programas de investigación, incluso cuenta con discos y casetes. Colaboró con una estación de radio dvblab.com, que está en Los Ángeles. Y entrados en su trabajo, lo que sí nos presumió fue el libro que ha escrito con la ayuda de otro investigador, José Ortega “Morelos”.
«Ojos Suaves/Soft Eyes» es una breve historia de los sonideros de Mexico, Puebla, León, San Luis Potosí y Monterrey, esto desde los primeros movimientos de los sonideros en nuestro país. ¡Super interesante!
De hecho nos confesó que si hay alguien que admira, es a José Ortega «Morelos», pues fue él y su hermano las primeras personas que a mediados de los años 70s, empezaron por primera vez a traer del centro y sudamérica, discos exclusivos a los sonideros que existían ya en México. Recordemos que fue una época sin internet donde tenías que ir a otro país a conocer música «exclusiva».
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Sin duda esta fue una entrevista gratificante, el gran conocimiento musical y conciencia por todos los géneros, nos hizo admirar a Tropic Aza.
Me va muy bien porque la música que toco es música que solo yo la toco, me interesa mostrar música nueva al público. Aunque haya sido grabado hace 50 años, es nueva porque hace años no tuvo ninguna repercusión, pero eso es lo interesante, que a pesar de los años para mí resulta mucho más vigente, mucho más actual y nos dice mucho más de nuestro presente que la música de ahora.
Sin más que decir nos presumió su club de baile mensual que es el primer miércoles de cada mes en la planta alta de la pulquería de Insurgentes y se llama “A mover el bote”, una fiesta que existe desde hace más de 10 años en la Ciudad de México y que para él es una especie de servicio social a la comunidad pues es un club de baile donde se va a moverse sin reglas y en un concurso.
Sigue la pista de este gran músico apasionado por seguir investigando y conociendo más estilos musicales de todo el mundo y de todas las épocas.
Síguelo en su Facebook y aquí te dejamos con el mensaje final de Tropic Aza.
Vivimos en una época donde la música está en un segundo o tercer plano y es un poco triste porque está ciudad ya fue la capital del baile, aquí en la CDMX se bailaba todos los días desde los más pequeños hasta los más grandes. En cada casa había un momento donde había que mover los muebles a un lado, poner la radio o el tocadiscos y nadie se quedaba sentado. Eso se ha perdido hoy en día, a poca gente le interesa bailar como actividad recurrente, ¡volvamos a esos días!
