Brenda Valderrábano @brenda_vaa

Sin duda los latinoamericanos tenemos una magia interior que nos mueve, transforma, y genera cambios a nuestro alrededor; una muestra clara de todo esto es Sophie, mejor conocida como La Chica, quien finalmente lanzó su primer álbum titulado: Cambio, el cual retrata la evolución de esta cantante de raíces venezolanas y francesas, y que nos dio la excusa perfecta para sentarnos a hablar con ella.

Cambio se estuvo preparando durante dos años, poco después de su primer EP, Oasis. Al hablar con Sophie se puede sentir su alivio al ver finalmente el álbum fuera: “Tengo esa tendencia a apurarme, una vez que termino un proyecto quiero empezar otro porque siento que he cambiado y quiero evolucionar, entonces lo que a cabo de hacer ya está viejo y me entra una neurosis bien rara, pero me siento orgullosa de haber esperado un rato para hacer las cosas bien y presentarlo como se debe.”

Oasis salió en el 2017 y venía cargada de emociones internas, pesadillas, angustias y neurosis que La Chica transformó en música para que no quedaran dentro de ella por bien de su salud mental. Lo considera un EP muy personal y lírico, una parte de ella que le encantó descubrir, sin embargo mantenía una onda más europea, que llamaba la atención en Francia.

A partir de eso, empezó a sentir que era necesario abrirse más al mundo y dejar de lado el miedo que tenía, que la hacía encerrarse en su cuarto, mientras trataba de sentirse protegida; después de eso, con la fuerza que la caracteriza, decidió enfrentarse al mundo caminando lado a lado con el miedo, pero sin dejar llevarse por él.  Esto la llevó a reconectarse con su lado latino, con el fuego, el baile y la expresividad que había mantenido apagado.

«Tenía el complejo latino acerca de los europeos, y fue una reconexión conmigo misma de aceptar que ese lado existe y no lo puedo apagar ni callar y tiene que vivir, así que comenzó a vivir de nuevo y fue increíble, ahí compuse canciones como “Drink”, “Ratas” o “Veo veo”. Es un lado orgánico, más físico y violento, con más energía y hace que me sienta más cómoda en el escenario, presentando algo que se parece realmente a mi y no una parte que le puede gustar a los europeos.”

El cambio no sólo fue personal, La Chica también espera un cambio en Venezuela, que se terminen los eventos que la han hecho sentir rabia, tristeza y frustración de no poder hacer nada a la distancia, así que decidió hacer música que les ayude a curar y a atravesar momentos difíciles, intentando mandar energía, apoyo moral y amor a través de sus canciones.

“No voy a hablar de política, no voy a cambiar el mundo, pero voy a hablar de las cosas que conozco, que es el amor, las relaciones y el ser humano.”

Por tal motivo, hay varias canciones dentro de Cambio que son un homenaje a Venezuela. Uno de los ejemplos más claros es “Ratas”, que es una crítica al imperialismo y la situación en general de América Latina. Nació de los eventos en Venezuela, y se expresa desde el punto de vista del opresor, haciéndola más irónica y cínica, pero también es una manera de decirle al pueblo latinoamericano que tiene el poder de cambiar las cosas.

La Chica es parte del Mooi Collective, que es un colectivo que reúne a muchos artistas de todas las ramas, que van avanzando y desarrollando el arte juntos. Su finalidad es desarrollar ideas sin sentirse bloqueados por las grandes instituciones, y es algo que la emociona, porque la hace creer en que cosas importantes pueden suceder y puede haber un cambio.

«Estamos sembrando apenas, la idea es compartir, ayudarse y apoyarse. Es algo que no existe en Francia, allá es más difícil porque es mucho más individualista, y acá siento el poder. Siento que los mexicanos no se dan cuenta porque están aquí, pero tienen que saberlo,  su país tiene un avance cultural increíble que no deben dejar ir.”

Ser mujer en la industria musical la ha llenado de fuerza, en su opinión, ha experimentado su lado más salvaje, eso que ella llama la brujería que durante siglos, han tratado de destruir y callar porque saben que las mujeres son poderosas. La fuerza de creación que tienen se debe desarrollar  para que crezca con fuerza, la que se necesita para defender un proyecto en un medio machista, pero las mujeres pueden con eso y más con ayuda del reconocimiento de ese lado salvaje.

Su estilo híbrido hace de La Chica un proyecto muy interesante, no sólo en su música, sino también en su persona. Su alma se calienta llevando cosas de colores y texturas diferentes, y carga saturación tanto en su ropa como en sus canciones, inspirado en el arte latinoamericano, especialmente la cultura y estética mexicana.

“Me encanta que hay una conexión que no han perdido con sus ancestros, que aunque se transforma sigue ahí, no se han dejado destruir por el imperialismo. México y Estados Unidos han tenido un intercambio artístico muy interesante que hace que tengan mucha cultura y sean capaces de recibir un proyecto como el mío, tan raro e híbrido, porque tienen los códigos para entender las referencias latinas más la música moderna.”

Finalmente, Sophie espera regresar muy seguido a México, instalarse poco a poco y conseguir más público en este país. Así que si se quedaron con ganas de escucharla en vivo y ser testigos de su fuego latino, estén al pendiente de sus redes sociales, en los que se encuentra como La Chica, y no olviden escuchar su nuevo álbum Cambio que ya está disponible en Spotify.