Por Eder Yañez
Luis Alberto Spinetta es considerado uno de los pilares del rock en nuestro idioma, y no es para menos, ya que desde muy pequeño se desenvolvió cerca de la industria musical y heredó de su padre el gusto por la música y la interpretación, pasó por bandas y escenarios hasta que logró definir su sonido y su composición como lo conocemos ahora, el aporte de «El Flaco» para la música es hasta el día de hoy, la columna vertebral del sonido argentino en el género del rock.
El paso de Spinetta por la música siempre tuvo algo que se tomó como un sello, el amor, formaba parte predominante en la composición y en la temática de los discos, la contemplación y la familia surgieron con el paso de los años, permitiendo así que involucrara a sus familiares en el proceso creativo, Dante Spinetta integrante de Illya Kuryaki and the Valderramas, participó en infinidad de temas colaborando con su padre y esto se refleja hasta este segundo disco póstumo del cual es momento de hablar.
Catarina Spinetta hija del Flaco, encontró el día que murió su padre una USB con algunos archivos entre los cuales estaban estas canciones, las cuales quedaron en espera de que el tiempo jugara su papel dentro de esta ruleta, la familia decidió tomar estas canciones y re-trabajarlas tal y como le hubiera gustado al difunto Spinetta, en familia, con los seres que lo acompañaron a lo largo de su carrera, pero con esa admisión de nuevos factores y apostando a que todo tiene un proceso de transformación y de cambio, lo cual también definió la música del argentino, la evolución en el sonido.
El Flaco siempre gozó de un talento innato para relatar historias y poner sentimientos en papel, sus letras y su peculiar forma de cantar, la cual en momentos se asemejaba a los tangos, al rock y a la influencia de artistas internacionales, pero sin perder ese timbre y ese fraseo muy a su estilo y a su comodidad, que también ha quedado plasmado como sello de casa para firmar este material póstumo, del cual podemos escuchar y compartir en cualquier proveedor de contenido musical.
El disco contiene 7 temas que nos llevan por vivencias y relatos los cuales están enfocados a dejar en claro el abanico de sonidos a los cuales llegó en vida y como si fuera una premonición, la selección se percibe bastante premonitoria al incluir las voces de Dante y Valentino como cereza del pastel en un disco que sabe a una celebración familiar mas que a un álbum póstumo, hasta en ese momento El Flaco fue un personaje visionario y adelantado a su tiempo, el cual a 70 años de haber nacido, sigue siendo tema de conversación y admiración por parte del gremio, dicen que las cosas buenas jamás pierden su actualidad, nos queda claro con la música de Spinetta.
